La Feria es un libro abierto

Todos para el Salvador, como el Domingo de Ramos, pero sin lluvia. Un homenaje indirecto al alcalde de Sevilla que en 1973 trasladó la Feria del Prado a Los Remedios. A Juan Fernández Rodríguez García del Busto, que murió en los primeros días de agosto, hermano mayor honorario de Pasión, la hermandad que abandera un psiquiatra en esta ciudad que ahora se vuelve loca con la Feria. Un oasis de albero, una tregua en los augurios. ¿Crisis? Osiris.

La Feria es un cruce de caminos y en ese sentido nada más justo que arranque el día del Libro, que este lunes fue fiesta en Aragón, en Castilla-León y en la ciudad de Cáceres. En Sevilla fue día laboral y lectivo, pero la gente se vistió de domingo para cumplir con el ritual del alumbrado y el pescaíto.

La primera Feria del alcalde Juan Ignacio Zoido, que no quiere llevarse al Prado la Feria sino la Ciudad de la Justicia. El nuevo equipo municipal pone en marcha este martes mismo el nuevo género periodístico de las no recepciones. La Feria de los espectros. El común de la ciudadanía se hará fuerte en sus respectivas casetas. Una legión de camareros repartía cubiertos en las mesas de la megacaseta del Círculo de Labradores, presidida en su interior por los carteles de dos pintores de estilos muy distintos, pero que dieron con la clave: Félix de Cárdenas y Juan Valdés. Dos artistas que reivindican que la Feria la inventaron dos hombres de ascendencia industrial para lucimiento de la mujer sevillana.

Vídeo: Antonio Pizarro

Hablando de pintores, nunca habrá estado tan cerca de la Feria Manuel Salinas. Presume de llevar décadas sin poner los pies en el real, pero, cazador cazado, el artista abstracto aparece retratado en la galería de personajes de la revista Telva, junto a la duquesa de Alba, Victorio & Luccino, los Guardiola. Manuel Salinas junto a Asunción, 5, entre las tiendas Textura y Persa. Compartiendo mampara con Morante de la Puebla. El pintor que pintó un toro para los maestrantes aparece con un torero que en un PGOU de la Feria estaría en su nomenclátor.

con la feria a cuestas

La Feria es un libro abierto cuya paginación es el enunciado de sus casetas. Este lunes cumplió 15 años Marco Gutiérrez Ferrand, nieto del único sevillano que ganó el Planeta, Manuel Ferrand, vecino de esta barriada de Los Remedios convertida en metrópolis de quita y pon, Cartuja de farolillos, Expo de pabellones domésticos.

Las horas previas fueron una exhibición casi castrense de los vehículos anfibios de Lipasam. Un escamondado a ciencia y conciencia para que ese muladar fuera por arte de magia unos jardines de Versalles. Eva Macías, la reportera que revolucionó la crónica ferial con su barrido de casetas, antropología entre visillos, va con su reportero, Javier Ojeda, captando imágenes de la antesala de la fiesta. La reportera nació un seis del seis del 69. Los mismos dígitos de día y mes que Ignacio Sánchez Mejías, torero que fue presidente del Betis y acoge en la calle que lleva su nombre la caseta de la peña bética José Ramón Esnaola.

¿A cuánta gente no habrán casado los amigos que toman un refrigerio en la terraza de José Luis antes de ir a la Feria? Carlos Telmo, el rondeño que se vino a la Expo desde Canadá, Carmiña Leyva, Alfonso Candau. Son muchos -¿verdad, Eduardo Jordá?- los que conocieron a su media naranja en la Feria de abril.