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Fábrica de artillería: Obras urgentes para garantizar el armazón de un BIC

La intervención consistirá en la restauración de un pilar con fuertes grietas que supone un riesgo para las personas y la estabilidad del inmueble

Fábrica de artillería / Antonio Pizarro
Manuel Ruesga

07 de octubre 2017 - 02:35

Obras urgentes para garantizar el armazón de la Fábrica de Artillería. La intervención de la Gerencia de Urbanismo tiene la finalidad de garantizar la estabilidad de la estructura de una zona en la que existe un pilar con fuertes grietas. Los técnicos exponen que es necesario recuperar su funcionalidad, ya que implica un riesgo para las personas y la estabilidad del edificio.

La intervención está dirigida "a evitar los pandeos parciales de zonas de la fábrica sin traba con el resto, reparar las muescas realizadas en su sección, y para mayor tranquilidad, asegurar esa traba". La arquitecta explica que, teniendo en cuenta que existen cargas descentradas debido al peso muy superior de la linterna grande, es necesario realizar un atado por si puede recoger alguna posible tracción. Las grietas que sea posible se tratarán mediante llaveado con piezas de ladrillo similar al existente tomados con mortero de cal, retirando las piezas que aparezcan partidas por la grieta o que no presenten traba de origen entre sí. Las grietas que no puedan ser llaveadas se tratarán mediante una inyección de pastas de mortero de cal de mayor o menor densidad con granulometría muy fina. El plazo propuesto para la ejecución de estas obras no debe superar un mes y contarán con un presupuesto de 6.601 euros (IVA incluido). La idea es que este amplio recinto acoja actividades culturales a partir de febrero del año que viene.

El soporte se encuentra en la zona del edificio conocida como el Taller de Herramientas

Entre las justificaciones que aporta la arquitecta para la intervención de urgencia se encuentra el zunchado (armadura de acero para evitar que se curve) que se le puso al pilar en una intervención anterior como medida provisional. Este elemento debe ser sustituido, ya que no cuenta con cualidades estéticas para su permanencia dado que se trata de un Bien de Interés Cultural (BIC) y está comprometida la estabilidad del inmueble a medio plazo. En segundo lugar, la dirección técnica detalla que se está preparando un convenio para la cesión de este espacio (Taller de Herramientas) a una entidad cultural, por lo que se ha solicitado la agilización de este refuerzo. Por último, quieren hacer constar que el edificio tiene unas dimensiones muy grandes, y que por motivos técnicos y económicos, no es posible acometer todas las obras de conservación urgentes en un mismo proyecto, y que por ello se han redactado varios.

En el proyecto redactado por los técnicos del Servicio de Renovación Urbana y Conservación de la Edificación se explica que el espacio conocido como la Catedral (donde se encuentra el pilar dañado) presenta cierta inestabilidad estructural de diseño, dado que las bóvedas rebajadas presentan empujes horizontales, y las que lindan con el muro de fachada no encuentran otra aledaña cuyo empuje la equilibre. Lo mismo ocurre con las que lindan con las linternas grandes, que transmiten empujes mayores. Es por ello que aparecen tirantes metálicos colocados hace unos años para equilibrar estos empujes.

El pilar dañado es uno de los dos pilares (simétricos uno en cada lado del Taller de Herramientas) que se encuentran sometidos a unas cargas mayores que el resto debido al peso de las linternas grandes, además del peso de las otras tres bóvedas colindantes. Calculando las cargas que soportan estos pilares cruciformes, "nos encontramos que no superan las 150 toneladas. La superficie del pilar es aproximadamente 1,85 metros cuadrados. Por tanto, su resistencia de cálculo está muy por encima (alrededor de ocho veces) de la que soporta realmente". La conclusión es que el pilar debería soportar bien la carga a la que está sometido. Los técnicos deducen que el motivo por lo que este elemento está tan dañado "es la falta de traba en la ejecución de sus fábricas".

La antigua Fábrica de Artillería ocupa una superficie de 22.000 metros cuadrados. Debido a su gran extensión se han tenido que ejecutar planes parciales de conservación, de ahí que ahora su puesta en marcha como recinto cultural sea también por fases. Hasta la fecha se ha intervenido en 6.500 metros cuadrados, especialmente en la zona con mayor valor patrimonial.

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