Calle rioja
Francisco Correal
El filósofo de Cerro Muriano
Distrito Casco Antiguo
La Plataforma ciudadana en defensa del ficus de San Jacinto ha criticado esta semana la decisión municipal de cortar el último ficus de la Encarnación. El colectivo expresa su “rechazo contundente” a una tala que considera “inminente y precipitada” y recalca que antes hay que “completar los estudios técnicos y ponderar las posibles soluciones para mantener este ejemplar necesario para el medio ambiente y la salud de los ciudadanos”.
Desde el gobierno local, la delegada de Parques, Evelia Rincón, mantuvo este lunes una reunión en la misma plaza de la Encarnación junto al ficus con esta plataforma y con otras entidades que integran la Mesa Ciudadana del Árbol para tratar de explicar las razones de la tala. Asistieron la Plataforma del Ficus de San Jacinto; Verdes Equo y Rastrea Andalucía; la asociación Sevilla se Muere y Greenpeace.
El edil explicó las fases de actuación que se han llevado a cabo hasta decidir la tala por “decisión técnica ya que el mal estado del sistema radicular (raíces) conlleva un riesgo alto de vuelco”. Según Rincón, “hemos debatido en un tono cordial y colaborativo y les hemos explicado la situación real de pudrición interior del tronco del ficus aportando los distintos informes”.
La delegada de Parques y Jardines explicó que no se puede llegar hasta el final con el estudio de las raíces porque los “técnicos” municipales avisan de que “aunque se apuntale el ficus con medidas de sujeción, habría riesgo de vuelco por el mal estado en el que encuentra el ejemplar”. Rincón señala que “haber profundizado en el estudio del sistema radicular hubiera puesto en peligro a los operarios que llevaran cabo esa operación por la delicada situación en el que se encuentra el sistema de anclaje del árbol”.
Según Evelia Rincón, convocaron a las plataformas el pasado viernes con la intención de que tuvieran toda la información y para “tratar el asunto con la máxima transparencia”, y añadió que algunos asistentes pudieron ayer ver in situ la situación actual del ficus y comprobar “que la pudrición del centro del tronco continúa hasta la base”.
La tala definitiva del ficus no será esta semana pese a estar previsto entre los días el 16 y 17. Se retrasa hasta que llegue una gran grúa y especialistas. La delegada de Parques indicó que “el apeo definitivo se realizará la semana que viene” por ser cuando pueden contar con una grúa de gran porte y un equipo de especialistas”. También dependerá de la intensidad de las lluvias y el viento previstos.
Tras la tala, se eliminará el material de plásticos que ha recubierto las raíces desde las obras de 2009 en la Encarnación “y que ha provocado la disfunción del sistema radicular”. Luego habrá que reordenar el alcorque y determinar el árbol que se plantará.
El próximo jueves comenzará la instalación de los elementos de sustentación de los ficus en la plaza del Museo y en la plaza del Cristo de Burgos. Rincón recordó que “estas medidas ya se indicaban en los informes del 2021 que el gobierno de Antonio Muñoz no llevó a cabo suponiendo una irresponsabilidad”.
La plataforma ve “evidente que el deterioro del estado de salud del ficus de la Plaza de la Encarnación se debe al abandono municipal durante años, pero ello no justifica la tala del mismo sin que se hayan completado los estudios técnicos que certifiquen el estado y las alternativas a la tala”.
Con todo la plataforma valora “el buen talante del nuevo gobierno municipal con relación al cuidado del arbolado urbano, como se ha puesto de manifiesto en la solución hallada al ficus centenario de San Jacinto”.
“La tala sólo ha de ser la última solución, sostenida en estrictas evidencias técnicas, a un árbol catalogado en una ciudad como Sevilla, declarada en 2019 en estado de emergencia climática. Exigimos completar los estudios técnicos y ponderar las posibles soluciones para mantener este ejemplar necesario para el medio ambiente y la salud de los ciudadanos”.
Añaden que el ficus de la Encarnación, catalogado en el Inventario de Árboles Singulares de Sevilla, debe tener conservación especiales. “Su copa ya ha sido drásticamente reducida, por lo que no presenta riesgo para la seguridad de los ciudadanos”, señalan.
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