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Dimisión en medio de la crisis interna

Javier Chaparro

24 de septiembre 2008 - 05:03

Lo extraño hubiera sido situar la dimisión de Lolo Silva en un contexto de normalidad en el seno de Izquierda Unida. La Asamblea Federal prevista en Madrid para el próximo mes de diciembre se presenta como un punto y seguido más en la crisis que vive la organización desde mediados de la década de los 90, cuando inició un descalabro electoral que le mantiene al filo de la desaparición.

IU en Sevilla no existe. Su dirección local es invisible y a nivel provincial carece incluso de un líder que la represente. Su último coordinador fue el moderado Sebastián Martín Recio, quien dimitió hace nada menos que año y medio tras la debacle de los comicios municipales. Ninguna de las partes teóricamente interesadas en reactivar la federación ha dado paso alguno para formar en todo este tiempo una nueva Ejecutiva que marque el ritmo de su labor en las escasas instituciones donde tiene presencia.

El Ayuntamiento de Sevilla es uno de esos últimos islotes, aunque la bandera que ondea en las delegaciones que detentan sus tres concejales sea la del PCA, no la de IU. No en vano, Silva pertenece a la generación de jóvenes cachorros de la que Felipe Alcaraz, el factótum de los comunistas andaluces, se sirvió y se sirve para marcar la pauta en el partido. El Consistorio es, en verdad, el centro de operaciones del PCA y su fuente de ingresos a través de la contratación de militantes en puestos de confianza y libre designación.

Es ese, precisamente, el objetivo que el PP ha puesto en su punto de mira con el fin de intentar derrocar al gobierno de coalición PSOE-IU. La sombra de la corrupción -por tenue que se dibuje dada la ausencia, momentáneamente, de denuncia ante la Justicia- ha llevado a Silva a presentar su renuncia de forma sorpresiva. En la propia IU se intuye desde hace tiempo que la estrategia de los populares pasa por dosificar la "información sensible" de aquí a las elecciones de 2011. Quién sabe si el cese no es tan voluntario como su protagonista afirma. Habrá que preguntarle a Rodrigo Torrijos.

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