Desguace El Poyo, más de 30 años de descontaminación en Pilas

Dar un servicio cercano, transmitir seguridad y confianza, así como la experiencia son algunos de los aspectos fundamentales que una empresa ha de tener para poder triunfar en su labor. En este caso, Desguace El Poyo reúne todas esas características, además de la longevidad de su empresa en el sector y el desarrollo que ha tenido a lo largo de este tiempo. Más de treinta años, como desguace en Sevilla, avalan la labor de esta empresa que de la mano de Pedro Garrido sigue peleando de manera incansable por ser un referente nacional en este sector.

Situada en Pilas, Desguace El Poyo se dedica a la descontaminación y reciclado de vehículos siniestrados, así como a la venta de todo tipo de piezas para vehículos. Estos valores sitúan a esta empresa como una de las referentes en la descontaminación, reciclado, cuidado medioambiental o ecoeficiencia, aspectos muy importantes en la actualidad y que dan un valor añadido a la labor realizada en esta empresa.

De la mano de Pedro Garrido Rodríguez, director de la empresa, conocemos en primera persona cómo ha evolucionado el sector y la propia empresa, así como los motivos que hacen que esta sea un referente en el sector.

Es importante, sin duda, ahondar en la cuestión empresarial, pero uno de los valores más relevantes de esta compañía es la cercanía con el cliente, la familiaridad que transmiten. Por ello, en esta entrevista, comenzamos con una pequeña presentación de su director, Pedro Garrido que transmite todos aquellos valores que nos quieren hacer llegar desde la empresa.

¿Quién es Pedro Garrido y cómo has llegado hasta aquí?

Bueno, Pedro es un chico que a los 17 años comenzó a trabajar en el negocio familiar, Desguace El Poyo. Aquí aprendí el oficio y me di cuenta de que me apasionaban los coches.

Hace ya casi quince años que me puse al frente del centro, con el objetivo claro de convertir esta empresa en un referente a nivel nacional. Después de tantos años sigo siendo un apasionado del motor y no dudo en seguir manchándome las manos de grasa junto a los compañeros.

En todos estos años, ¿cómo ha evolucionado el sector?

Bastante y además muy rápido. En el recuerdo quedan las imágenes de coches amontonados en instalaciones frías y llenas de barro, eso ya no se ve. En poco más de una década, las viejas chatarrerías se han ido transformando para convertirse en modernas instalaciones cuyo fin es recuperar y reutilizar la gran mayoría de los componentes de un vehículo al final de su vida útil. Además de todo ello, también hemos de ayudar desde nuestras empresas al medioambiente.

¿Cómo se ayuda al medioambiente desde estas empresas?

Con los CATV (Centros Autorizados de Tratamiento de Vehículos) las cosas han cambiado para mejor, ahora son centros de descontaminación y desguace que cumplen todos los requisitos medioambientales y que deben tener una autorización previa para la actividad en cada Comunidad Autónoma. De esta manera se está consiguiendo un impacto medioambiental mínimo y un alto índice de reciclado.

¿Cómo ha evolucionado Desguace El Poyo en particular?

Considero que hemos ido evolucionando un poco más lento. No obstante, gracias al equipo que tengo a mi alrededor, hemos avanzado bastante más rápido que algunos de nuestros competidores. Esto se debe a que apostamos por la inversión de stock actual y moderno, así como herramientas de última generación que nos ayudan a darle a nuestros clientes un trato rápido, eficaz, cercano y con la máxima calidad posible.

Somos una empresa que ha apostado por las nuevas tecnologías para dar visibilidad a nuestro centro y poder llegar a un número más amplio de personas. Por otro lado, nos hemos centrado en disponer de un amplio stock de todas las marcas y modelos de vehículos para poder cubrir las necesidades de nuestros clientes.

Finalmente, algo que consideramos esencial en nuestra empresa es la formación y capacitación de nuestros profesionales, al cual hemos ampliado en más de un 100% en los últimos cinco años.

¿Cuál es, por lo tanto, el propósito de esta empresa?

Nuestro propósito principal es cuidar el medioambiente, aportando a nuestros clientes una calidad y profesionalidad a la altura de lo que ellos merecen y nosotros queremos transmitir.

Es curioso el nombre de la empresa, ¿por qué el nombre de Desguace El Poyo?

Es una empresa familiar y el nombre viene de una larga tradición. “El Poyo” es un apodo familiar que sigue perdurando a lo largo del tiempo y por el que todo el mundo nos conoce y nos identifica. No sabría decir exactamente de dónde viene el apodo ni el por qué, pero es algo familiar y lo mantenemos desde nuestros inicios hace ya más de treinta años.

¿Qué valor añadido aporta la empresa?

Hay que tener en cuenta que los desguaces presentan una amplia cantidad de beneficios para muchas personas. Podemos ayudar a aquellos que necesitan hacerse con un vehículo y a los que quieren cambiar alguna pieza a un precio asequible. Considero que lo más importante que nosotros podemos aportar es el beneficio para el medioambiente, evitando una mayor contaminación, realizando una recuperación, descontaminación y posterior reciclaje de todo material que se encuentre en buen estado. Somos expertos en la compra de coches siniestrados.

Además, personalmente podemos aportar rapidez, cercanía, un amplio stock como hemos comentado anteriormente, así como la calidad en nuestros productos y servicios. Intentamos también apostar por una economía circular y reducir el impacto medioambiental.