“La Junta no ha hecho nada en tres años sobre las VTC”
El presidente de la Unión Sevillana del Taxi, David Capelo, teme que Fomento quiera ‘colar’ una regulación deprisa “y con alevosía” antes de que expire el plazo en octubre de este año 2022
Sobre la regulación de las licencias de VTC, que corresponde a la administración autonómica, el presidente de la Unión Sevillana del Taxi critica que el Gobierno andaluz ha dejado pasar tres años sin cumplir con esa regulación ni dar explicaciones de lo que piensa hacer.
El gremio elogia la gestión de VTC y taxis del presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijoó, sentando a todos los implicados a hablar en una mesa, y pide a la consejería de Fomento que haga lo mismo.
“Este Gobierno andaluz en tres años no ha hecho absolutamente nada en la regulación de los VTC; no ha movido un dedo, y nos tememos que en los últimos meses le van a entrar todas las prisas y nos va a intentar colar una regulación con nocturnidad y alevosía”, protesta su presidente David Capelo. “Nos parece una salida de pata de banco que el Gobierno autonómico quiera regular las VTC en el último momento del partido. Eso es jugar al ventajismo político”, se queja.
El taxi quiere una licencia de VTC por cada 30 taxis, y sobre todo quiere sentarse a hablar con la Junta de cómo implantar una medida que fomente la competencia entre ambos servicios y no el intrusismo como ahora. “Estamos dispuestos a competir con unas mínimas condiciones y unas normas claras, donde todos sepamos cuál es el terreno de juego y nuestra función dentro de ese terreno de juego. Es lo único que estamos dispuestos a aceptar. Lo demás es conducirnos a todos a la selva, tanto a VTC como a taxis”.
“Más controles e inspecciones hacen falta”
La ley estatal de ordenación de los transportes terrestres, que entró en vigor a finales de 2021, ha mejorado más bien poco la situación de los taxis y VTC. “En tanto no tengamos controles que pongan cierta mesura en el despropósito que tenemos, como la invasión permanente de los carriles bus-taxi, el intrusismo que vemos en la zona de afluencia de pasajeros, el no retornar a una base cuando el recorrido se ha finalizado, el no disponer permanentemente de una hoja de ruta. Lo que hace falta es control e inspección y, en su caso, sanción de estos vehículos por la Policía Local en ciudades y por la Guardia Civil en carreteras.
La patronal lamenta que lleva muchos meses reclamando sin éxito a la consejera de Fomento de la Junta y a su equipo explicaciones sobre qué va a hacer con la regulación de las VTC. “La consejería siempre nos da silencio por respuesta y no nos dice a ciencia cierta sus propósitos. Mucho nos tememos, viendo el color político del Gobierno autonómico, que se va a dejar llevar por su lideresa Ayuso (presidenta de la comunidad de Madrid) que es la que va guiando los pasos”.
A cuenta del Decreto estatal que se aprobó con Ábalos, a partir de octubre de 2022 los VTC solo tendrían autorización para realizar servicios interurbanos, mientras que para dedicarse a servicios urbanos tendrían que ajustarse a la ratio establecida por el Tribunal Supremo de 1/30. “Lo único que el taxi está pidiendo es que se cumpla la ley. Si la ratio de 1/30 es revisable, veamos si es modificable este número. Pero convertir la movilidad urbana en una selva no beneficia ni al taxi ni a los VTC y mucho menos a los usuarios, que quieren calidad en los servicios públicos y eso implica que el servicio tenga rentabilidad económica”, señala.
En su opinión , el Decreto Ábalos 13/2018 viene a decir que “las VTC pueden estar cuatro años metiendo la mano en el bolsillo a los taxistas”, hasta octubre de 2022.
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