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Crónica de una “Victoria”

La expedición de Magallanes partió de Sevilla con cinco naves: Santiago, San Antonio, Concepción, Trinidad y Victoria, que fue la única que regresó a España comandada por Elcano junto a 17 hombres.

Emulando a Magallanes y Elcano a bordo del Pros

La Virgen de la primera vuelta al mundo

Una réplica de la Nao Victoria atracada en el muelle de las Delicias. / Juan Carlos Vázquez
Pilar Martín (Efe)

08 de agosto 2019 - 19:56

Santiago, San Antonio, Concepción, Trinidad y Victoria son los nombres de las cinco naves que un 10 de agosto de 1519 partieron del puerto de Sevilla con rumbo a las islas Molucas, aunque el destino quiso que sólo una de ellas regresara a Sevilla tres años después de dar la primera vuelta al mundo.

Aunque fue la conocida como Nao Victoria la única que logró rodear el planeta, todas ellas tuvieron un papel fundamental para que el portugués Fernando Magallanes y el español Juan Sebastián Elcano llevaran a cabo esta gesta en la que según los documentos oficiales, aunque las cifras bailan, se embarcaron 245 o 247 expedicionarios.

La nave Santiago

Seis meses después de salir de Sevilla (marzo de 1520) esta carabela, la más pequeña del contingente, encalló en el Puerto de Santa Cruz (Argentina) cuando se adelantó en solitario, a los mandos de Juan Serrano, a inspeccionar las costas de San Julián (Argentina).

Durante este suceso, debido a la oscilación de la marea, la nave chocó contra la rocas en la desembocadura del Río de la Plata y naufragó. Solo falleció un esclavo por lo que la tripulación logró salvar todos los enseres y víveres que portaba y dos de los hombres lograron llegar a pie hasta el puerto de San Julián, pedir auxilio y hacer que el resto de naves acudieran a su rescate.

La San Antonio

Era la más grande, la que tenía mayor capacidad de carga y la que más marineros llevaba, 60. Junto a la Victoria, la Trinidad y la Concepción se adentran en el buscado paso hacia el otro lado de América por el conocido Estrecho de Magallanes.

Es precisamente el marino portugués el que manda a la San Antonio y la Concepción como avanzadilla para inspeccionar este estrecho, y durante una de las noches de travesía el capitán de la San Antonio, el portugués Esteban Gómez, abandona la expedición y pone rumbo a España, donde llegarán en mayo de 1521.

El capitán de la expedición se queda así con tres naos con las que logrará cruzar este estrecho y desembocar en el océano Pacífico.

La Concepción

Fue quemada por los españoles en Filipinas por falta de hombres para tripularla. En ese momento (mayo-julio de 1521), y sin Magallanes tras su asesinato durante una batalla en Cebú en abril, la tripulación ha quedado disminuida hasta los 116 o 117 hombres.

Así, la Trinidad, a los mandos de Gonzalo Gómez de Espinosa, y la Victoria con Juan Sebastián Elcano al frente, continúan su viaje hasta llegar en noviembre de 1521 a las ansiadas islas de la Especiería, las Molucas (Indonesia).

La Trinidad

Salió de las Molucas cargada de clavo en diciembre de 1521 junto con la Victoria, pero nada más zapar de Tidore empezó a hacer aguas y pese a los esfuerzos por arreglar la avería ésta tuvo que quedarse porque requería de reparaciones de mayor alcance en el casco.

Pese a contar con carpinteros entre la tripulación, las reparaciones iban a durar meses, por lo que deciden que un 21 de diciembre zarpe la nao Victoria en solitario con 47 hombres.

Nao Victoria

Elcano y su tripulación emprenden el viaje con el único objetivo de llegar a España navegando hacia el Oeste evitando las rutas portuguesas para no ser capturados. Así que viajarán sin hacer escalas y alejados de las costas.

Una locura que convierten en cordura porque el 6 de septiembre de 1522, 18 hombres famélicos y enfermos entraron al puerto de Sanlúcar de Barrameda tras recorrer 14.460 leguas. La nao Victoria, haciendo honor a su nombre, se convirtió así en la primera en completar la vuelta al mundo.

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