El Consejo y el Parlamento pujan por San Hermenegildo

La carrera por San Hermenegildo continúa. Tras descartar la Hermandad de Pasión su traslado y apoyar la permanencia en el Salvador, los dos aspirantes a la cesión del edificio, de titularidad municipal, serán el Parlamento de Andalucía (el único oficial por ahora) y el Consejo General de Hermandades. El Ayuntamiento decidirá -en menos de15 días- quién disfrutará de su uso los próximos 30 años. Una elección que ya puede estar tomada. O eso, al menos, se intenta hacer creer.

La portavoz del Ayuntamiento y delegada de Cultura, Maribel Montaño, dijo ayer que "dentro de dos semanas habrá novedades". No quiso adelantar mucha información. Sólo la precisa: la restauración del edificio, que tendrá que financiar el nuevo inquilino de San Hermenegildo, se eleva a 1,4 millones de euros (más de lo que se estipuló en un principio) y, por ahora, sólo hay un aspirante oficial: el Parlamento. Las palabras de Montaño suenan a decisión tomada. Y a alerta.

En esta aspiración por hacerse con San Hermenegildo, la Cámara andaluza lleva ventaja. Sus gestiones comenzaron hace meses, y antes del verano la petición estaba formalizada. Este adelanto hace pensar que la balanza se incline hacia el Parlamento.

Pero no todo es lo que parece. En la institución que preside Fuensanta Coves ha causado cierta sorpresa (y algún enojo) encontrar tras el periodo estival a dos aspirantes (ahora sólo queda el Consejo), cuando el camino hacia San Hermenegildo estaba expedito. La solicitud entregada en verano ha sido clave para dinamizar las aspiraciones del Consejo y las que el jueves abandonó Pasión. Dos candidatos que, en un marco local, resultan más rentables electoralmente. La balanza, aquí, tiene otra inclinación. El aviso ha sido escuchado.

El presidente del Consejo, Adolfo Arenas, confirmó ayer su apuesta por San Hermenegildo. La junta superior de este organismo enviará al alcalde un escrito de intenciones con el objeto de que se abra un expediente para acceder a la cesión. El poco tiempo que, al parecer, queda no es ningún inconveniente para Arenas. Su apuesta es el diálogo: "Hay que hablar. San Hermenegildo lleva cuatro años sin ser habitado. No se puede decidir ahora todo en 15 días".

La principal duda que planea sobre el Consejo es la manera en que afrontaría la inversión para restaurar el exterior de la cubierta y la fachada. Más de 200 millones de las antiguas pesetas que el Consejo no tiene. "Todo el dinero que conseguimos -dice Arenas- es para las hermandades. Habría que buscar fondos, aunque todavía nadie nos ha dicho oficialmente cuánto cuesta el proyecto".

En este asunto no hay que olvidar que esta decisión coincide en el tiempo con la renovación del convenio para la explotación de la carrera oficial, sobre la que de nuevo -y auspiciada por el gobierno local- hay un debate sobre su ampliación (que ya ha encontrado la negativa del Arzobispado). Una coyuntura que no tiene por qué ser meramente casual.