El Cercanías, la alternativa de futuro

Ahora que el Gobierno central y la Junta de Andalucía han descartado definitivamente las obras de conexión del aeropuerto de Sevilla con Santa Justa por una línea de Alta Velocidad, la única opción de futuro y con ciertas posibilidades que queda sobre la mesa para acercar el aeródromo de San Pablo a la ciudad es el tren de Cercanías.

La conexión por Metro también quedó descartada en su día en los proyectos constructivos de Obras Públicas cuya redacción se cierra el 20 de diciembre, aunque inicialmente llegó a dibujarse en los anteproyectos un ramal de la futura línea 2 que llegaba al aeropuerto. El autobús y el taxi no son suficientes transportes para el aeropuerto de una gran capital que, además, tiene un área metropolitana con más de un millón de habitantes.

El trayecto de este Cercanías ya está dibujado en los planos sobre unos suelos reservados para este fin en el plan urbanístico vigente de Sevilla, concretamente en el capítulo 4 (Nuevas formas de accesibilidad en la ciudad metropolitana). El PGOU aprobado en 2006 reservó en su día suelo para desarrollar una infraestructura ferroviaria en superficie que partiría de las playa de vías del Polígono Calonge y pasaría junto a los barrios de Valdezorras y Aeropuerto Viejo antes de llegar al aeropuerto de San Pablo.

Este ramal de Cercanías, con doble vía electrificada y ancho convencional, tendría un trazado de entre 5,5 y 6 kilómetros (en función de los radios de curva que se adoptaran) y circularía en una plataforma en superficie, a excepción de algunos pasos elevados de conexión necesarios para salvar la línea ferroviaria de ADIF (Sevilla-Madrid), el arroyo del Tamarguillo y algunos viales, como la carretera de Brenes. Con esas características, y según cálculos de ingenieros del sector consultados por este periódico, la inversión necesaria para esta ramal oscilaría entre los 35 y los 40 millones. Ese gasto englobaría toda la infraestructura, vía, instalaciones, apeaderos (de 1 a 3), en función también de la definición que se hiciera de ese servicio.

Hasta el momento este Cercanías no consta en los planes inmediatos de ninguna Administración, pero el Ayuntamiento podría exigirlo a Fomento, la administración competente. Desde el punto de vista de la funcionalidad del transporte, los expertos consideran que la conexión entre Santa Justa y el aeropuerto por Cercanías es más óptima que otros sistemas ferroviarios, como el Metro, por su mayor capacidad de transporte y su flexibilidad para establecer frecuencias o servicios ajustados a horarios de vuelos.

Desde el punto de vista económico, la inversión para el Cercanías sería seis veces menor en relación al coste previsto para la conexión por alta velocidad con el aeropuerto. El tramo Santa Justa-Aeropuerto hasta el enlace con el Club de Campo se adjudicó por 241 millones, un coste en su mayor parte debido al trazado subterráneo que iba a ejecutarse con tuneladora.

La conexión del aeropuerto con una línea de Alta Velocidad quedó descartada definitivamente a finales del pasado octubre tras asumir el Ministerio de Fomento las obras que la Junta de Andalucía venía ejecutando entre Antequera y Marchena, donde había invertido casi 280 millones en sus 77 kilómetros. El llamado Eje Ferroviario Transversal se había proyectado para llegar hasta Sevilla pasando por el aeropuerto de San Pablo, pero Fomento prefiere conectar Marchena con Sevilla a través de Utrera y remodelando la vía existente, salvo si el nuevo Gobierno de Rajoy opina lo contario. Este eje ferroviario, prioritario para Europa, recibirá ayudas europeas.