Las obras de la Cartuja arrancan con retraso y durarán ocho meses

La remodelación de la Cartuja ha comenzado con retraso, pero se espera que cambie por completo la fisonomía del primer Parque Científico y Tecnológico de la ciudad antes del próximo verano. Aún queda por resolver los problemas de movilidad: falta de aparcamientos y conexión del futuro Cercanías con el Metro.

Los operarios de la empresa Heliopol, filial de Rusvel, cerraron ayer al tráfico la primera calle en la que se va a intervenir para sustituir pavimentos, aceras y mobiliario urbano, así como para recuperar las pérgolas y su característica vegetación. En definitiva, todos los elementos que se colocaron 17 años atrás para la Exposición Universal de 1992. La adjudicación fue en agosto por 4,4 millones de euros con cargo a los fondos públicos de plan Proteja, el programa de transición al empleo de la Junta.

Sin previa información a los ciudadanos por parte del Ayuntamiento de Sevilla y de la dirección del parque, ayer se cortó Tomás Alba Edison (tramo norte en sentido Leonardo da Vinci), la vía donde se sitúa el Centro Nacional de Aceleradores, en el extremo más próximo al puente del Alamillo, según confirmaron fuentes de la empresa.

Con toda probabilidad, le seguirá mañana viernes la calle Arquímedes, donde se asienta la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), si no se presentan imprevistos con la visita del ex presidente estadounidense Bill Clinton que hoy acoge la sede de la patronal andaluza. La idea es que corten calles parcial o totalmente pero siempre respetando los puntos sensibles relacionados con salidas de emergencia, servicios públicos y privados especiales.

Fuentes de la dirección del Parque Tecnológico aclararon que la sociedad Cartuja 93 ya está preparando toda la información sobre los cortes de calles con las fechas de duración de cada obra para distribuirla de inmediato, por todos los medios, entre las 344 empresas con sus respectivos empleados que se asientan en la isla. En esta zona de la ciudad se mueven a diario 25.000 personas.

Este calendario sustituirá al que el pasado 4 octubre se publicitó en la prensa local, que llegó a informar de un programa de cortes de calles parciales y totales que se iniciaría al día siguiente a cuenta de las obras en la Cartuja, aunque finalmente este calendario no llegó a cumplirse por el citado retraso que admite la constructora. Entonces se citó el corte parcial de la calle Euclides, de Isaac Newton (lateral norte) y de Tomás Alba Edison (lateral norte).

Fuentes de la empresa explicaron que las obras debieron empezar antes, pues se adjudicaron en agosto, pero sufrieron un retraso a cuenta de las negociaciones previas sobre los trabajos que iban a desarrollarse y sobre la contratación de personal.

En los ocho meses de plazo que como máximo durarán los trabajos -la empresa sostiene que es capaz de acabarlos el próximo 31 de mayo-, las actuaciones consistirán en demoler los firmes, asfaltar, sustituir aceras y reponer mobiliario urbano. Los símbolos vegetales de la Expo 92 como las pérgolas serán repuestas en los principales viales del parque, pero antes se renovará la parte textil que acoge la zona de plantación así como la estructura de estos elementos de sombra.

Según explicó antes del verano Cartuja 93, será la primera intervención en la isla en casi 20 años. La idea de la dirección del parque también apuntaba a poner en marcha la bola bioclimática, otro de los símbolos de la Expo, así como las fuentes ornamentales.

La situación de los acerados es especialmente delicada puesto que se utilizan como aparcamientos indiscriminados por parte de los conductores, ya que no quedan bolardos que lo impidan y apenas hay diferencia de nivel con la calzada. La solución será, pues, reponer los bolardos perdidos. La reforma de una punta a otra de la Cartuja abarcará desde la zona del Monasterio hasta el tramo anterior al Alamillo.