Campus Jovellanos ofrece una formación orientada al mercado laboral

En 15 días se iniciará el curso escolar 2021-22. La Formación Profesional (FP) y ocupacional es una alternativa a la formación reglada y, cada año, arrastra una mayor demanda en nuestra sociedad sevillana.

Este nuevo modelo supone una oportunidad de inserción laboral de la población juvenil al mercado, en sectores que son motores de nuestra economía y, en concreto, en nuestra ciudad como el turismo, la hostelería o el sector servicios.

En pleno centro de Sevilla, Campus Jovellanos, Centro de Formación Ocupacional, ofrece un amplio portafolio de contenidos de formación ocupacional y profesional con diferentes formatos presenciales (seminarios, talleres, cursos, programas con certificados de profesionalidad) y on-line. Entrevistamos a Javier López Fernández Director Campus Jovellanos.

–¿Qué es y cómo surge Campus Jovellanos?

–En 1918 se inicia en la calle Siete Revueltas número 33 la actividad de un Centro cultural y social tomando como nombre Centro cultural y Social Melchor de Jovellanos. Su objetivo social es promover nuestra cultura, gastronomía, así como los valores en educación y formación de nuestros jóvenes y ser un lugar de encuentro de la sociedad sevillana.

Con la pandemia y las consecuencias que han derivado de ella vimos necesario, en nuestro compromiso social, hacer algo más, y así surge Campus Jovellanos como centro de formación ocupacional.

–¿Qué se proponen?

–Como consecuencia del Covid-19, ha cambiado muchísimo nuestro entorno social, económico e incluso nuestras propias costumbres y relaciones. Esto también ha ocurrido en nuestros entornos más privados.

La transformación digital ha conseguido, durante este tiempo de pandemia, ser una alternativa fundamental en las relaciones, pero también ha producido una gran brecha social y económica, afectando muy gravemente a sectores que siempre han sido motores de nuestra economía como el educativo, el turístico y el comercial.

En este contexto, y comprometidos con nuestro entorno social y económico, en el centro de Sevilla surgió el Campus Jovellanos. Bajo el concepto de Campus cubrimos, no solo la formación como primer objetivo, sino también seguiremos con nuestra actividad social y cultural (talleres, exposiciones, presentaciones) y ofreceremos nuevos servicios que sean sustentadores económicos de nuestro proyecto social.

–¿Entiendo que Campus Jovellanos es una entidad privada?

–Sí, somos una entidad 100% privada. Nos constituimos en 2018 como una Sociedad Andaluza Cooperativa de Profesionales Autónomos. Hoy estamos ya preparados para ofrecer una amplia oferta formativa tanto en régimen presencial como on-line, ya que contamos con una plataforma digital propia con más de 35.600 horas de contenidos formativos. No obstante, lo más importante es que contamos con un equipo de profesionales con una amplia experiencia en sus áreas y una gran vocación docente que entendieron mi proyecto, han confiado en mí y hoy, sin ellos, esto no sería posible.

–Entonces, Javier, ¿me dice que lleva cuatro años consolidando este proyecto?

–Sí. En 2015, como le ocurrió a otras tantas personas, me quedé en el paro. Caí en la cuenta, entonces, de que tenía que reinventarme, pues con 50 años era muy difícil reinsertarme en el mercado laboral; a los dos años inicie este proyecto económico y social bautizado como Campus Jovellanos.

–¿Cómo definiría la labor del Campus en el sector educativo?

–Al hablar de formación ocupacional, nos referimos a que nuestro cometido es orientar, capacitar y desarrollar habilidades en nuestros alumnos que les permitan asumir nuestras competencias en las empresas y, en otros casos, le posibilite su incorporación al mercado laboral. En este sentido, trabajamos sobre una serie de objetivos principalmente, como por ejemplo potenciar en nuestros alumnos valores en sus prestaciones, es decir, habilidades (comunicación, escucha activa, liderazgo, trabajo en equipo…) y capacidades (manejo de herramientas digitales, lengua extranjera profesional…). Además, perseguimos fomentar la formación profesional (FP), como alternativa de formación reglada.

También pretendemos incidir en la vinculación de las empresas con los centros de formación, de modo que podamos ofrecer a nuestros alumnos una formación dual efectiva.

Finalmente, queremos fomentar el emprendimiento y el cooperativismo entre autónomos como modelo jurídico empresarial.

–¿Cuál es la oferta distintiva?

–Ofrecemos un amplio catálogo formativo con contenidos transversales y específicos o especializados en subsectores como la educación, el turismo, la hostelería/restauración y el sector servicios en general

Ofrecemos a nuestros alumnos la experiencia y vocación formativa de nuestro equipo docente, que persigue, ni más ni menos, que obtener todo el potencial posible los estudiantes de cara a su incorporación al mercado laboral.

Es por ello que una de nuestras prioridades es la orientación de los participantes hacia el mercado laboral mejorando sus competencias dentro de la empresa y atendiendo a las necesidades de esta. Además, al ser un centro digitalizado, cada alumno podrá interactuar y familiarizarse con programas que serán sus herramientas de trabajo, de modo que estamos contribuyendo a los procesos de transformación digital que se encuentran a la orden del día.

–¿A quién va dirigida vuestra formación?

–Por un lado, a la población comprendida entre los 18 y los 35 años que, preferentemente, sean trabajadores de empresas que requieran mejorar en sus competencias. Adecuamos nuestros programas a las necesidades de las empresas en el reciclaje de su personal en áreas de administración (digitalización del área), marketing y comunicación y lengua extranjera. También, además, a la población juvenil ocupacional u trabajadores que desean complementar y acreditar su formación.

Por otro lado, con los programas de Formación Profesional nos dirigimos al público juvenil (15 a 17 años), que ven la alternativa de Formación Profesional como un acceso a la Universidad sin corte de nota como sucede en la formación tradicional. Estos programas los iniciaremos en septiembre de 2022.

–Su proyecto tiene por delante un gran compromiso social y humano que, hoy, la sociedad y en concreto la población juvenil demanda.

–Quizás mi suerte y modelo a seguir es el legado de mi padre, Javier López de la Puerta, fundador de San Telmo Business School. He vivido toda una trayectoria de una escuela de negocios referente en el ámbito internacional. Sin embargo, como bien dices, hoy la sociedad demanda técnicos profesionales con valores. Este es nuestro cometido.

–Como despedida Javier, ¿qué mensaje quiere dejar a nuestros lectores?

–Primero, agradeceros vuestro apoyo como patrocinadores de nuestro proyecto social educativo. A las empresas deseamos pedirles su colaboración y posibilitar nuestra propuesta de convenio de colaboración con Campus Jovellanos; y, a los jóvenes, recomendarles que se ocupen de mejorar sus capacidades y habilidades, dado que esto les posibilitará mejorar sus competencias dentro de las organizaciones y empresas y en su inserción en el mercado laboral.