Cae la banda del Negro, un grupo muy activo de ladrones de viviendas asentado en Torreblanca

La Policía realizó numerosos registros en el barrio la semana pasada y ha recuperado joyas y otros objetos sustraídos

Entre el material encontrado se ha hallado la pistola de un agente de las Fuerzas de Seguridad al que entraron a robar en su vivienda

Policías nacionales desplegados en Torreblanca. / Antonio Pizarro

La Policía Nacional desmanteló la semana pasada una organización criminal asentada en Torreblanca, que se dedicaba a robos con fuerza y con violencia en domicilios en distintos puntos de Sevilla y provincia. La banda estaba compuesta por una decena de personas, a las que se les imputa al menos 16 delitos. El líder del grupo es José Manuel S. R., de 38 años y conocido como el Negro, y su lugarteniente es Pedro P. P., alias el Peíto. Ambos cuentan con un largo historial criminal.

La operación la ha llevado el Grupo de Robos de la Policía Nacional en Sevilla, que se encarga de investigar todos los asaltos a domicilios que se desarrollan en la capital andaluza. En el momento de las detenciones, la Policía tuvo que desplegar un dispositivo en Torreblanca, compuesto por decenas de agentes de distintas unidades, como Policía Judicial, la UPR (Unidad de Prevención y Reacción), los GOES (Grupo Operativo Especial de Seguridad) y Seguridad Ciudadana.

Los agentes han logrado recuperar numerosas joyas de oro, entre ellas una cadena de fabricación única. También se han intervenido más de 15.000 euros, electrodomésticos pequeños, relojes, armas largas propiedad de cazadores y también un arma corta, que fue sustraída a un miembro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad al que le robaron en su casa.

En los registros también se encontró cocaína y plantas de marihuana, con un sofisticado sistema de producción. La investigación sigue abierta para tratar de esclarecer más robos que quedan todavía por aclarar. En los últimos meses se han dado varias oleadas en robos en viviendas, tanto en Sevilla como en el Aljarafe. Estos asaltos han coincidido con las vacaciones de Semana Santa y de la Feria de Abril.

Los líderes de la banda, el Negro y el Peíto, fueron hace años detenidos por atracar a representantes de joyería. Posteriormente fundían el oro en la joyería de un familiar de otro delincuente de Torreblanca. Los dos cabecillas del grupo son viejos conocidos de la Policía y tienen antecedentes por delitos violentos. En diciembre del año 2009, el Negro fue detenido hace una década por el Grupo de Atracos de la Policía Nacional, después de un robo con pistolas y pasamontañas en un chalé de Alcalá de Guadaíra, del que se llevaron una caja fuerte con oro, monedas y 600 euros en efectivo. En este robo participaron cinco personas, y por él también fue detenido uno de los delincuentes.

Casi un año después, en noviembre de 2010, fue arrestado por varios atracos a mano armada a repartidores en el barrio de Torreblanca. Junto a él cayó otro joven que había trabajado como repartidor y se conocía los hábitos, rutinas e itinerarios de éstos. Una de las víctimas fue un empleado de la empresa de patatas Matutano que fue asaltado en la calle Torre Albarracín, en Torreblanca.

En noviembre de 2011 volvió a ser detenido por amenazas a una joven de Torreblanca, para que retirara una declaración suya que le implicaba a él en un atraco a un recaudador de máquinas de tabaco, ocurrido poco antes en la avenida de la Mujer Trabajadora, en el distrito Macarena.

Su lugarteniente, el Peíto, ha sido vinculado en el pasado a los robos de vehículos de alta gama, que después eran usados para cometer robos en naves y establecimientos. Esta es una práctica muy habitual de las bandas de ladrones, que utilizan vehículos sustraídos para no levantar sospechas.

Otros dos detenidos por robar en un bar de la calle Albérchigo

No ha sido esta la única operación policial en Torreblanca en los últimos días. El pasado domingo, a las cuatro de la mañana, agentes de la Policía Local de Sevilla detuvieron a dos hombres que estaban robando en un bar de la calle Albérchigo. Cuando patrullaban por la zona, escucharon golpes metálicos y sorprendieron a uno de los detenidos (de 22 años y con 11 detenciones anteriores) que salía del interior del establecimiento portando una palanqueta de hierro y el cajón de la caja registradora con dinero en metálico. A continuación salía el segundo, de 21 años de edad. El bar tenía la puerta forzada y todo el interior revuelto. Ambos fueron detenidos y trasladados a dependencias policiales.

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