Bolaños archiva la causa contra uno de los auditores de Mercasevilla

La juez María Núñez Bolaños, que investiga un delito societario en la empresa Mercasevilla, ha decidido archivar la causa contra José Ignacio Alonso Rivero, socio y firmante de la auditoría de cuentas de la lonja correspondiente a 2008, que fue elaborada por la firma Price Watherhousecoopers.

En un auto dictado el pasado 4 de noviembre, la instructora ha acordado finalmente el archivo que la defensa del auditor había planteado a la juez Mercedes Alaya en abril de 2014, varios meses después de prestar declaración, y que reiteró en octubre de este año ya ante la nueva titular del juzgado.

En la resolución, la juez recuerda que la Fiscalía de Sevilla no se ha opuesto al sobreseimiento provisional de las actuaciones contra el auditor, al que Alaya había atribuido delitos de malversación y falsedad por haber avalado unas cuentas de Mercasevilla que en realidad ocultaban unas pérdidas de 7,8 millones de euros -la lonja declaró unos beneficios de 258.024 euros-, según el informe pericial elaborado por los peritos de la Agencia Tributaria.

La instructora subraya en la resolución que, tras la práctica de una serie de pruebas, como la propia declaración del auditor, la ratificación del informe pericial y la documentación recibida del Instituto de Contabilidad y Auditoria de Cuentas (ICAC), "a día de hoy y sin perjuicio de la práctica de nuevas pruebas y la recepción de nueva documental, no se puede concluir la comisión de delito por parte del señor Alonso Rivero". La juez añade que procede, por tanto, acordar el "sobreseimiento provisional respecto del imputado, en cuanto a los hechos que le fueron en su día imputados".

El auditor prestó declaración en diciembre de 2013 ante la juez Mercedes Alaya, a la que aseguró que desconocía "cualquier irregularidad" que hubiera en las cuentas de Mercasevilla, y defendió su labor como auditor. José Ignacio Alonso Rivero explicó que no examinaron la facturación que realizó Mercasevilla a la fundación socioasistencial en los años 2006, 2007 y 2008, "tan sólo algún apunte contable de una muestra selectiva con el objetivo único de confirmar el saldo contable que tenía a su favor Mercasevilla", aunque insistió en que no es cierto que conociera la realidad económica de la fundación ni las pérdidas que arrastraba, ni por supuesto la confusión de personal existente entre ambas entidades.