Biciestaciones del mundo que inspiran a Sevilla

Sevilla/La capital andaluza, que contará en los próximos meses en el intercambiador de San Bernardo con la primera biciestación segura de Andalucía con 250 plazas en un recinto cerrado, se ha inspirado en otras ciudades del mundo que cuentan con espacios de este tipo, sobre todo en Holanda (Utrecht, Zaandam, Alphen aan den Rijn). Hay más ejemplos inspiradores en Washington (EEUU) y en Barcelona.

La diferencia con Sevilla es que en las estaciones mencionadas las plazas para bicis se cuentan por cientos e incluso por miles, y aparte de la guarda segura de bicis ofrecen servicios de reparación, de venta y muchas otras ventajas. Los detalles pueden verse en las imágenes adjuntas.

Hoy por hoy, la biciestación más grande del mundo por ahora está en Tokio, en la estación Kasai (9.400 plazas) pero a finales de este año todo indica que la superará con creces la biciestación de Utrecht al alcanzar las 12.500 plazas para bicis.

La asociación ciclista A Contramano, autora de la propuesta sevillana, celebró ayer que se ponga en marcha un proyecto “pionero en Sevilla” y que supone plantearse “en serio por parte de la administración la intermodalidad entre las bicis y el transporte público”.

Con todo, la entidad lamenta que la instalación que ha sacado a licitación el Ayuntamiento de Sevilla –con un presupuesto de 179.000 euros– es “una mínima parte” de lo que sus diseñadores (Manuel López-Peña, Vicente Hernández-Herrador y Ricardo Marqués) propusieron al Consistorio.

“Es una versión muy disminuida de lo que propusimos. Nosotros planificamos una biciestación para 700 bicicletas con tiendas, información turística y bar, con reparación y con un servicio de préstamo de 500 bicis similar al bus+bici (de la estación Plaza de Armas) porque esto último es lo que iba a tirar del proyecto”, explicó ayer Ricardo Marqués, uno de los diseñadores.

Marqués asegura que una biciestación con servicio de préstamo similar al bus+bici sería una buena opción para los miles de viajeros del área metropolitana que llegan a Sevilla en tren, y opina que sin este préstamo el proyecto que va a acometer la Gerencia de Urbanismo puede generar problemas de desconfianza en los usuarios, que lo vean como un sitio donde no es seguro dejar la bici.

El responsable de A Contramano añade que el diseño original de la propuesta era una instalación de dos plantas, una de ladrillo y otra efímera, Por contra, la licitación del Ayuntamiento recoge un solo módulo de construcción efímera de 198 metros cuadrados de superficie.

Los detalles de la propuesta de biciestación de Sevilla pueden verse en el proyecto de julio de 2015 que está colgado en la web ciclista de la Universidad de Sevilla (bicicletas.us.es), en el apartado documentación complementaria. El objetivo es incentivar el uso de transporte público en el intercambiador más importante de toda la aglomeración urbana de Sevilla.

Respecto a las causas que han provocado esta extrema simplificación de la propuesta original, A Contramano asegura que ha sido por razones presupuestarias y por cuestiones urbanísticas (una instalación de más dimensiones obligaba a recalificaciones de suelo).

Otros países que están ampliando sus biciestaciones son Alemania, Dinamarca, Japón, Suiza, Suecia, México, Australia, etcétera.