El Ayuntamiento sustituye la flota tradicional por vehículos eléctricos

El Ayuntamiento trabaja para renovar la flota actual de vehículos, propulsados con combustibles fósiles, y por ello contaminantes, por una gama eléctrica. La última acción en este sentido es la licitación el pasado lunes de un contrato para el alquiler de 15 coches eléctricos, para los próximos cinco años, que serán utilizados por los distintos servicios y áreas municipales y los capitulares. Estas unidades se sumarán previsiblemente tras el verano a los más de 200 que ya funcionan en Lipasam o a los 25 que se incorporaron a finales de 2016 a Emasesa. Según los datos aportados por el Ayuntamiento el consumo y el mantenimiento de un vehículo diésel supone un gasto medio de 8,5 euros por kilómetro, mientras que el de uno eléctrico es de tan sólo 2,2 euros.

La junta de gobierno local aprobó el pasado día 11 licitar el servicio de alquiler de 15 vehículos eléctricos para la flota del Consistorio que sustituirán a otros tantos de combustibles fósiles. El pasado lunes se publicó en el perfil del contratante el pliego del contrato con sus diferentes cláusulas administrativas y prescripciones técnicas. El importe total asciende a 540.144 euros y se extenderá entre los últimos meses de este año, con un importe previsto de 11.253 euros; y los años 2018, 2019, 2020 y 2021, con un presupuesto de 123.783 euros. El contrato de alquiler de vehículos eléctricos será publicado, además, en el Diario Oficial de la Unión Europea (DUE).

"Se trata de un contrato para cinco años que, por vez primera, incluye exclusivamente la movilidad eléctrica, dentro de la estrategia de este equipo de gobierno de la ciudad de tender a un transporte más sostenible y, por tanto, más respetuoso con el medio ambiente y menos perjudicial para la propia salud de las personas", explicó el delegado de Hacienda y Administración Pública, Joaquín Castillo, tras la aprobación por parte de la junta de gobierno local.

En el pliego de condiciones técnicas se especifica que los vehículos deben ser compactos de cinco puertas, con cinco plazas y una potencia mínima de 90 caballos. El equipamiento exigido contempla la dirección asistida, abs, climatizador, cierre centralizado, aviso para peatones, navegador y radio con manos libres, elevalunas eléctricos delantero y trasero, llantas de aleación con un mínimo de 16 pulgadas, extintor de polvo de 3 kg como mínimo con sistema de sujeción, sistema antirrobo con alarma o pintura metalizada. En cuanto a la autonomía, debe tener un mínimo de 300 kilómetros y el tiempo de carga ha de ser de menos de ocho horas.

El contrato fija en un máximo de 15.000 los kilómetros a realizar en un año por vehículo y detalla que el adjudicatario se compromete al mantenimiento integral de los mismos, como por ejemplo, el reemplazo de los neumáticos siempre que sea necesario. El coste máximo de los coches será de 620 euros al mes.

Castillo destacó la importancia que el actual gobierno de la ciudad confiere a las estrategias para la lucha contra el cambio climático y a iniciativas que propicien un desarrollo económico más sostenible. Esta licitación se enmarca entre las medidas del Plan de Acción por el Clima y la Energía de Sevilla (Paces) que fue aprobado el año pasado por el Pleno y en los compromisos asumidos por Sevilla dentro del Pacto de Alcaldes de París.

Además, la Empresa Metropolitana de Aguas de Sevilla (Emasesa) incorporará este año 17 nuevos vehículos eléctricos que se sumarán a los 25 ya existentes. Tras una inversión de 320.000 euros, supondrán casi la mitad de toda la flota de la empresa. El objetivo es que en 2020 se alcance el 100% de autosuficiencia energética en la empresa, que actualmente se sitúa en un 68%. Por su parte, Lipasam ya cuenta con 225 vehículos eléctricos (209 triciclos, 12 motocarros y 4 minibaldeadoras), que suponen una mejora y agilización de las tareas de limpieza en zonas de difícil acceso, además de dotar de movilidad a los operarios y reducir tanto el impacto acústico como las emisiones de gases contaminantes.