El Ayuntamiento desconoce cuándo se reabrirá al tráfico Bueno Monreal

La reapertura al tráfico de la avenida Cardenal Bueno Monreal es a día de hoy una incógnita. Los miles de conductores que llevan año y medio soportando atascos y teniendo que tomar vías alternativas por la construcción del paso soterrado tendrán que seguir conviviendo con estas incomodidades, y lo que es peor aún, sin saber hasta cuándo. El delegado de Movilidad, Francisco Fernández, se niega a dar una fecha para el final de los trabajos que, en principio, deberían culminar el 30 de junio, cuando expira la segunda prórroga para las obras financiadas con el Plan Proteja de 2009. Por ahora, se ha avanzado en la conexión de los dos tramos en los que está dividido el túnel en el cruce con La Palmera, una operación que ayer se vio retrasada por culpa de una tubería de aguas residuales de gran tamaño.

Con toda seguridad la nueva Corporación municipal que tome posesión el próximo 11 de junio se encuentre con una ciudad levantada por obras en muchos enclaves. Dentro de esta herencia de la Era Monteseirín se incluye el paso soterrado de Bueno Monreal, un proyecto que ha conocido ya tres fechas de finalización, dos de ellas retrasadas y aún está por ver que la tercera se cumpla. Francisco Fernández prefiere no fijar ninguna más. Ni se fotografía delante de los pequeños avances ni se arriesga a aportar más información sobre la evolución de los trabajos ante los imprevistos que han surgido en su construcción.

El último sucedió ayer. En principio, Movilidad había convocado a las 19:00 a los medios para fotografiar la conexión entre las dos partes en las que se encuentra dividida el túnel (desde el puente de las Delicias hasta La Palmera y desde dicho enclave en adelante), pero la cita se tuvo que retrasar "por cuestiones técnicas", ya que habían surgido problemas para salvar el ovoide, esto es, la tubería de gran tamaño que recoge aguas residuales y que obliga a trabajar con una maquinaria distinta. La cita se aplazó a las 21:30, pero los fotógrafos sólo pudieron tomar imágenes de las máquinas excavando, ya que la conexión se estaba ralentizando, según anunciaron fuentes de la UTE adjudicataria de la obra. Al cierre de esta edición la unión todavía no se había producido.

No es la primera vez que esta conducción origina un problema. A principios del pasado año, recién iniciadas las obras, tuvo que paralizarase el proceso tras descubrirse la presencia de este ovoide, un obstáculo no contemplado en el proyecto pese a que dicha tubería viene recogida en los planos del PGOU. La decisión de Urbanismo fue salvar esta canalización colocando dos tuberías menores a los lados, lo que provoca que cada vez que se interviene cerca de la zona -como ocurrió ayer- se tenga que trabajar con maquinaria distinta, lo que demora los trabajos.

La aparición del ovoide provocó que se pidiera la primera prórroga para concluir la obra, que tendría que haberse acabado en el primer semestre de 2010, al estar financiada con 5,8 millones del Plan Proteja de 2009 (la cantidad luego se elevó). La segunda fecha para finalizarlos fue el 31 de diciembre de 2010, algo que tampoco se cumplió al encontrarse otras canalizaciones (agua, luz, gas y fibra óptica) que demoraban las excavaciones. El Ayuntamiento argumentó que los datos que les habían proporcionado las empresas suministradoras sobre la profundidad en la que se encontraban estas redes diferían de la real. Este percance también ocurrió en el otro túnel que se construye en la ciudad y que une la Avenida de Andalucía con la A-92 en la Ronda del Tamarguillo, a la altura del centro comercial Los Arcos, lo que demuestra la falta de previsión de la delegación de Movilidad, ya que no tienen detallados los planos hasta depués de adjudicar las obras y una vez que éstas ya se han iniciado.

Se volvió a pedir de forma excepcional otra prórroga hasta el 30 de junio de este año. Pero de nuevo en este semestre volvieron a producirse retrasos que impidieron que el paso soterrado pudiera inaugurarse antes del plazo límite marcado por la ley electoral (29 de marzo).

La conexión de los dos tramos del túnel de Cardenal Bueno Monreal es la antesala del final. El delegado de Movilidad prefiere guardar silencio. Ayer ni siquiera acudió a dicha unión al encontrarse en una reunión. Mientras, el alcalde electo, Juan Ignacio Zoido, ya avisa de que uno de sus principales fines será la coordinación de las obras para que proyectos como éste "no se eternicen".