El Ayuntamiento de Sevilla recibe el proyecto Cartuja Qanat un año y medio después de su estreno oficial
Proyecto Cartuja Qanat
En este tiempo se han acabado las instalaciones que faltaban y se ha repuesto la vegetación perdida en algunas zonas, aunque los científicos no han dejado de ir al recinto a diario a hacer experimentos
Su innovación científica consiste en refrigerar naturalmente contra el calor un espacio abierto con un mínimo consumo de agua
Fotogalería de las instalaciones del proyecto Cartuja Qanat de Sevilla (2024)
Con zonas verdes renovadas, el proyecto Cartuja Qanat, junto al antiguo pabellón de México, cuya innovación científica consiste en refrigerar naturalmente contra el calor un espacio abierto con un mínimo consumo de agua, se ha entregado oficialmente al Ayuntamiento de Sevilla. La ciudad lo ha recepcionado un año y medio después de su estreno oficial a finales de 2022.
Cuenta con una inversión de 5 millones de euros financiados en un 80% por Europa (Fondos Feder) y su desarrollo va a durar cinco años, de 2022 a 2027.
El Cartuja Qanat ha estado cerrado al público más de un año por problemas varios. La inauguración se hizo a la carrera en el mandato socialista de Antonio Muñoz, pero la obra se cerró pese a que algunas instalaciones estaban inacabadas, tales como "la operación del sistema y el elemento de mantenimiento y seguridad del mismo", como informó este periódico en septiembre de 2023.
El cierre al público durante tanto tiempo no ha impedido que los científicos de la Universidad de Sevilla acudieran a diario al recinto Qanat para trabajar en pruebas y experimentos con el agua.
Aparte de las actuaciones inacabadas, había que reponer parte de la vegetación del proyecto, ya que se había secado por fallos en la tubería. No fue por la imposibilidad de regar ante la emergencia por sequía, ya que el proyecto se alimenta con agua del río, con la red de agua bruta cuya zona de bombeo está en Barqueta, y de ahí coge agua del río que se distribuye por una red interna por Cartuja. En lugar de Emasesa, ha sido la Entidad de Conservación del PCT Cartuja quien se ha encargado de reponer la vegetación que se perdió, según ha aclarado la dirección del Parque Científico Tecnológico.
Otro detalle que retrasó la apertura del proyecto fue el cerramiento, cuya obra iba a licitarse hace un año por 400.000 euros, pero se descartó al final.
Los socios de este proyecto, liderado por el Ayuntamiento de Sevilla, son la empresa metropolitana de aguas Emasesa, la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla, el Parque Científico y Tecnológico (PCT) Cartuja, la Universidad de Sevilla, el Instituto Eduardo Torroja del CSIC y la Fundación Innovarcilla. Hasta el 31 de octubre de 2027 van a estar los socios en este proyecto.
Emasesa se ha encargado de rematar buena parte de las instalaciones que faltaban para su apertura al público. Esto ha hecho posible que la junta de gobierno local de José Luis Sanz haya aprobado esta semana la incorporación al patrimonio municipal de las instalaciones del proyecto Cartuja Qanat por parte de Emasesa y de la Fundación Innovarcilla. Las instalaciones quedan adscritas al área de Cartuja y Parques Innovadores que gestiona el delegado Álvaro Pimentel.
El cambio político en el Ayuntamiento (salida de Muñoz y entrada de Sanz, y cambio de consejero delegado de Emasesa de Jaime Palop y su equipo a Manuel Romero) y el inmovilismo previo a las elecciones municipales perjudicó la supervisión de todos los detalles del proyecto. De agosto de 2022 a julio de 2023 no hubo una persona para dirigir los trabajos, llamar a la constructora (Guamar) y exigirle que arregle esas cosas que quedaron pendientes.
Diferente al microclima de la Expo92
El reto esencial del Cartuja Qanat es que enfríe con el mínimo gasto de agua, que el consumo de agua del sistema sea mínimo. En los 5 años que va a estar funcionando debe ser capaz de generar sostenibilidad.
La diferencia del Cartuja Qanat con el microclima de la Exposición Universal de 1992 de Sevilla es que no se basa en agua pulverizada, como el de la Expo92, sino en evitar el consumo de tanta agua bajo tierra, lo que permite que no libere tanta pérdida.
Otro detalle esencial de su puesta en marcha es que hasta 2027 atraiga la demanda de reservas de este espacio que justifiquen que es un bien que hay que mantener. Cualquier entidad o persona individual puede reservar el espacio para organizar actividades. Hay anfiteatro, zoco, una isla atemperada, etc. No hay que pagar alquiler, sino sólo que cada organización prepare lo que va a hacer en el edificio y dejarlo después como estaba.
También te puede interesar
Lo último
Contenido ofrecido por Cervezas Alhambra