El Ayuntamiento de Sevilla alegará contra la paralización de la tala del ficus de Triana

El Ayuntamiento de Sevilla presentará alegaciones tras decretarse la paralización de la tala del ficus centenario de la parroquia de San Jacinto, en Triana, por un juzgado de la ciudad, según han indicado a Efe fuentes del Consistorio.

El auto judicial publicado el pasado 18 de agosto por el juzgado de lo Contencioso Administrativo número 9 de Sevilla se establece un plazo de tres días para presentar estas alegaciones, plazo que expira este martes. Las fuentes consultadas han anunciado que se pronunciarán cuando el juez tome una decisión al respecto.

Durante este periodo, la Administración local ha aportado documentación que avala la licencia otorgada para el apeo, con los informes de expertos recabados meses atrás. Unos datos que, según la Asociación Multisectorial de la Jardinería de Andalucía (AMJA), son insuficientes y requieren de la aportación de especialistas "independientes".

Labores de protección

El pasado sábado el Ayuntamiento comenzó con los trabajos de protección del ficus de la parroquia de San Jacinto en Triana en cumplimiento del auto judicial decretado por dicho juzgado.

Los trabajos consisten en proteger con arpillera la superficie de las ramas que ha quedado al descubierto tras los cortes, aplicar cicatrizantes en caso necesario y valorar el riesgo en las raíces.

La AMJA ha vuelto a defender este lunes que el ficus, reducido al tronco y las raíces tras las labores de tala acometidas la semana pasada, puede sobrevivir con las medidas de protección adecuadas. Aunque "desconfía" de que la comunidad parroquial de San Jacinto y el Ayuntamiento las proporcione.

El apoyo del Arzobispado

Por su parte, el Arzobispado de Sevilla publicó este domingo un comunicado donde defendía "el respeto absoluto y apoyo" a las decisiones adoptadas por la parroquia de San Jacinto y su párroco, Javier Rodríguez.

La decisión de talar el ficus, según ese comunicado, no se ha tomado a la ligera, sino que se ha tratado de "salvaguardar la integridad del árbol centenario pero, por encima de todo, la seguridad de las personas y el edificio", según recoge el comunicado.

La Archidiócesis concluye que "respeta" las decisiones judiciales, mientras que "reitera su respaldo y comprensión a la comunidad parroquial por las actuaciones llevadas a cabo en este proceso".