El Arzobispado creará una oficina de "transparencia y rendición de cuentas"

La de Sevilla será la primera diócesis de España en contar con una oficina de transparencia y rendición de cuentas a imagen de la aprobada en la última sesión plenaria de la Conferencia Episcopal Española. Monseñor Asenjo anunció ayer la creación "a corto plazo" de este "protectorado canónico de fundaciones y asociaciones", como se podría denominar, en el que tendrán que rendir sus cuentas las cerca de 600 instituciones de la Archidiócesis. Esta medida se corresponde con la política de transparencia puesta en práctica por la Iglesia en España y su creación es una sugerencia directa del Ministerio de Hacienda.

Precisamente, uno de los grandes lamentos del arzobispo es el escaso porcentaje de hermandades que presentan sus cuentas al Arzobispado, algo que es obligatorio según el Código de Derecho Canónico, las Normas Diocesanas para Hermandades dictadas por monseñor Amigo en 1997 y la reciente actualización aprobada por Asenjo. Durante el pasado año aproximadamente el 35% de las hermandades existentes en la provincia presentaron sus cuentas a la Administración Diocesana. Monseñor Asenjo recordó que, aunque ya es obligatorio, a partir de ahora lo será aún más: "Hay una legislación civil para entidades sin ánimo de lucro y uno de los requisitos es la obligación de rendir cuentas. Sí será obligatorio presentar las cuentas en esta oficina, cuya creación es una sugerencia del Ministerio de Hacienda". Respecto a si las hermandades deberían hacer auditorías de sus balances, como hace el Arzobispado, el prelado señaló que tal vez las de "más tronío" si quieren hacerlo de manera voluntaria. El decreto de la creación de la oficina de rendición de cuentas podría estar preparado a principios de octubre.

Por otro lado, durante el año 2015 se experimentó un aumento considerable en las aportaciones de las hermandades sevillanas al Fondo Común Diocesano. De los 58.558,62 euros aportados en 2014 se pasó a los 106.205,35 ingresados durante el pasado ejercicio. También se incrementó el número de corporaciones que colaboraron. De 41 hermandades se pasó a 78. "Algo hemos conseguido. Esperamos que en un futuro no muy lejano participen todas", espetó Asenjo. El arzobispo recalcó que la aportación al Fondo Común Diocesano es "absolutamente obligatoria y necesaria". "Me parece muy bien que colaboren con Cáritas, los Centros de Orientación Familiar o tengan sus obras sociales, pero todo eso es voluntario".

Según las nuevas normas diocesanas, el arzobispo será quien fije el porcentaje que debe aportar cada una de las hermandades: "No voy a mandar a la Policía a quien no colabore con la Iglesia. Bastante desgracia tienen ya. Yo seguiré acudiendo a sus fiestas e iré a coronar a sus Vírgenes". En cualquier caso, Asenjo reconoció que "va creciendo la conciencia de que las hermandades son una parte muy importante de la Iglesia diocesanas. Tengo la impresión de que van a ser receptivas".

También subieron las colaboraciones de las hermandades sevillanas para el sostenimiento del Seminario Metropolitano: 91.385,15 euros por 87.350 del ejercicio económico 2014.