Aprocom pide paradas en Plaza Nueva, Encarnación, Magdalena y María Auxiliadora
Metro de sevilla
El comercio tacha de "incoherente y sorprendente" que se hable "de una estación que iría a cincuenta metros".
La Confederación Provincial de Comercio y Servicios de Sevilla (Aprocom) señaló este martes que Plaza Nueva, Plaza de la Encarnación, Plaza de la Magdalena y María Auxiliadora como estaciones "irrenunciables" de la futura red de Metro, después de haberse hecho público que la Junta únicamente contempla una parada en el centro, en Plaza del Duque, como la alternativa preferente de la Línea 2.
El portavoz de Aprocom, José Aycart, señaló que las propuestas vertidas desde la Consejería de Obras Públicas y Vivienda "no cubren mínimamente las necesidades de transporte público que tiene esta ciudad", recalcando que el debate actual es "hablar del sexo de los ángeles", porque "colocar una parada, o a lo mejor dos, en el centro no es en ningún caso el transporte público que necesitamos".
Subrayando que para el comercio la petición prioritaria gira en torno a una red de transportes "eficiente" en la que se tengan en cuenta todos los medios de transporte, Aycart dijo que las cuatro estaciones son las que "como mínimo" necesitaría un mallado de este tipo.
Por otra parte, el portavoz de Aprocom incidió en otras problemáticas como el "caos" que podría provocarse de prosperar un trazado por la Ronda del metropolitano en túneles semisuperficiales. Asimismo, tachó de "incoherente y sorprendente" que "después de decirnos que no se podía usar el trazado de Plaza Nueva que existe desde hace treinta años por ser muy profundo ahora se esté hablando de una estación que iría a cincuenta metros".
"Hay tanta frivolidad con un tema tan importante como el metro de Sevilla, que el Ayuntamiento ha llevado a un primer plano absoluto al eliminar los transportes en superficie para determinadas zonas haciendo necesario e ineludible el metro, que nos quedamos con la sensación de que todo es una tomadura de pelo", criticó.
Por otra parte, Aycart indicó que sería un "error inconcebible" llevar el trazado a la superficie, ya que "el metro no es un tren", si bien admitió que en algunas zonas, como los barrios periféricos con grandes avenidas y bulevares, o la conexión entre Santa Justa y el aeropuerto, establecer el metro a ras de suelo "no entraría en competencia con el tráfico privado o de peatones".
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