Apartamentos turísticos en un edificio de Aníbal González

Apartamentos turísticos

El edificio de oficinas de la calle Martín Villa, que lleva sin uso un año, contará con 34 habitaciones y una piscina en el ático

El céntrico edificio regionalista de Aníbal González fue rehabilitado íntegramente en 1996.
El céntrico edificio regionalista de Aníbal González fue rehabilitado íntegramente en 1996. / Juan Carlos Vázquez

Los apartamentos turísticos que abrirán en el edificio del antiguo Hotel Biarritz (antes San Sebastián) tendrán un total de 34 habitaciones. El proyecto ya ha recibido el visto bueno de la Comisión Local de Patrimonio Histórico. El inmueble fue construido por Aníbal González entre 1918 y 1920. Su estado de conservación es bastante bueno, ya que ha estado abierto hasta hace sólo un año, y rehabilitado íntegramente y adaptado para oficinas hace 22 años tras haber permanecido cerrado durante un largo periodo de tiempo. Cuenta con tres locales comerciales en la parte baja; planta primera, segunda, tercera y un amplio ático con piscina.

La remodelación integral del edificio está prevista que arranque antes de Semana Santa, ya que la promotora cuenta con todas las autorizaciones administrativas necesarias y la Gerencia de Urbanismo otorgó la licencia de obras hace unos días. La Delegación de Salud de la Junta de Andalucía también dio su visto bueno a la piscina en la planta superior. El proyecto no contempla ninguna intervención en los locales de la planta baja. La idea de Aquitania Home Suites es que los apartamentos abran sus puertas antes de la primavera del año que viene tras realizar una inversión que supera los 1,1 millones de euros. Ese dinero irá para reforma, acondicionamiento y decoración. Tendrán una ubicación privilegiada al estar junto a la Plaza de la Campana. A escasos metros se encuentran las calles más comerciales de la ciudad (Tetuán, Sierpes y O´Donnell). El cliente objetivo son parejas con alto poder adquisitivo.

La finca de cinco plantas se encuentra en buen estado de conservación

El nivel de protección patrimonial con el que cuenta el edificio regionalista obliga a respetar en su totalidad de las fachadas que dan a las calles Martín Villa y Vargas Campos. Aníbal González hizo un reparto homogéneo y de sentido horizontal en las portadas de ladrillo, donde resaltan las impostas que apenas se quiebran por la presencia de los balcones. Además, la conservación obligatoria llegará a las primeras crujías, la escalera, la disposición del patio con columnas y la cubierta.

El arquitecto ha previsto una redistribución interior con particiones para distribuir los apartamentos, así como una serie de actuaciones para dotar a la actividad de las instalaciones necesarias para cumplir con las normativas. Tanto las fachadas como la cubierta y el suelo se trasdosan para alcanzar las prestaciones acústicas y térmica requeridas. La carpintería exterior también se sustituye por ese mismo motivo, respetando la configuración de los huecos de la portada de ladrillo. La cubierta será transitable y los clientes pondrán acceder desde la planta ático, que aparece diseñada como una zona común con piscina. De los 34 apartamentos turísticos, 21 contarán con un dormitorio. El resto serán estudios. La reforma propone que la planta baja sea una zona de recepción y las plantas primera, segunda, tercera y ático para alojarse los clientes. Cada una de las plantas del edificio cuenta con 507 metros cuadrados.

El proyecto cuenta con el visto bueno de la Comisión Local de Patrimonio

El edificio Biarritz es un ejemplo del mercado de oficinas que siguen cerradas y sin uso en Sevilla y han encontrado una vía de salvación en los apartamentos turísticos y en los hoteles, un sector en evidente auge en la ciudad. Según los datos aportados por el informe 2017 del sector terciario de Inerzia, esta es la vía por la que se está reduciendo el stock de edificios de oficinas cerradas a cal y canto por falta de clientes, sobre todo en las zonas más céntricas, que atraen a las cuatro o cinco empresas operadoras dedicadas al negocio de los apartamentos turísticos. El boom de estos apartamentos está influyendo no sólo en el mercado de viviendas de venta y alquiler, sino en el mercado terciario. De los 29 edificios de oficinas que están cerrados en la zona urbana, la mayor parte de ellos han pedido el cambio de uso para acoger apartamentos turísticos o bien establecimientos hoteleros.

El antiguo Hotel Biarritz

Construido entre los años 1918 y 1920 por el arquitecto sevillano Aníbal González, el inmueble ubicado en el número 3 de la calle Martín Villa tuvo un primer uso hotelero. Comenzó como Hotel San Sebastían. Al poco tiempo pasó a llamarse Hotel Biarritz. Detrás se encontraba Juana Juantegui, perteneciente a unas de las familias más importantes en negocios de hostelería que existían en el norte del país. Los visitantes se alojaban en una de las zonas más privilegiadas de la ciudad. A escasos metros de la Plaza de la Campana. El establecimiento hotelero cerro sus puertas en 1977, perdiendo la ciudad uno de sus alojamientos emblema. 41 años más tarde recupera su uso primitivo.

stats