Antonio Muñoz, alcalde de Sevilla: "Hay gente que me dice que se nota la limpieza"
El alcalde apuesta por colocar la urinarios portátiles en la Madrugada y reconoce que faltó diálogo antes de talar el ficus de San Jacinto
"Hay que remontarse a la Expo para encontrar tanta inversión en la ciudad"
"Me preocupa que Sevilla se convierta en una ciudad estándar por el turismo"
"El ruido político en torno a Sánchez me inquieta"
–La limpieza sigue siendo una china en el zapato...
–Al llegar a la Alcaldía esa era una opinión generalizada, hoy en día hay gente que me dice que se nota la limpieza. Con el refuerzo de personal se tiene que notar por fuerza. No es lo mismo 126 personas más que 126 personas menos.
–¿Endurecerá las sanciones?
–Está previsto en la modificación de la ordenanza. Dejar un excremento de perro en la calle no puede salir tan barato. Y también debe haber una mayor colaboración del sector de la hostelería, al recoger los veladores hay que dejarlo todo limpio y eso no todo el mundo lo hace.
–Aparte de la limpieza, díganos otros problemas que le han trasladado los vecinos.
–Los problemas cotidianos están muy focalizados en limpieza, estado del pavimento y arbolado. La gente quiere ver a la policía de barrio, es uno de mis grandes objetivos para el próximo mandato.
–¿Le preocupa que no salgan adelante los presupuestos?
–El presupuesto prorrogado impide realizar inversiones. No podemos perder un año. Los sevillanos no pueden pagar el peaje de las elecciones. Sacar adelante los presupuestos sería la mejor noticia. Como no tengo mayoría absoluta, soy consciente de que debo ceder y cederé al máximo de mis posibilidades en aras del interés general y para que Sevilla tenga normalizada su vida económica.
–¿Funciona la cultura para mejorar las desigualdades en los barrios más desfavorecidos?
–Hay una experiencia positiva en el Polígono Sur. La Factoría Cultual está sirviendo para la inserción social y ocupar las horas libres de los jóvenes a través del flamenco o la pintura. Dedicarían el tiempo a otras cosas si no existiera ese equipamiento. No es suficiente, tenemos que mejorar la habitabilidad, el espacio público y el absentismo escolar. Hay un tema que me preocupa, los cortes de luz. Es inadmisible.
–Su antecesor prometió erradicar el Vacie antes de mayo...
–Hemos avanzado de manera significativa en el desmantelamiento. Basta comprobar la superficie que ocupaba el asentamiento de antes con el de ahora. Pero es verdad que hemos estado dos años de Covid que ha retrasado mucho el objetivo. Será en mayo o un poquito más adelante.
–¿Por qué es tan lento el proceso para instalar ascensores en los edificios con problemas de accesibilidad?
–Cambiamos el sistema y apostamos por hacer las obras nosotros. No se me ocurre otra fórmula para acelerar más el proceso. Hemos tenido problemas con las empresas. No puedo sentirme satisfecho de la velocidad que lleva este sistema porque hay vecinos que tienen aprobado el correspondiente ascensor y no son aún una realidad.
–¿Se subirá al tranvía para llegar a Luis de Morales antes de las elecciones municipales?
–Creo que no. No me obsesionan las inauguraciones antes de mayo. Se terminará cuando se tenga que terminar, lo importante es que el tranvía continúe hasta el centro para cerrar el anillo.
–¿Y estará activado el Plan Respira en el centro y Triana?
–Antes de las elecciones, seguro. Hay que reducir el coche privado. Este toro hay que cogerlo por los cuernos, sacaremos conclusiones y lo extenderemos a otras zonas de la ciudad si es necesario.
–¿Las multas han logrado reducir el caos de los patinetes?
–Hemos erradicado la imagen caótica que presentó Sevilla durante algún tiempo de patinetes aparcados en cualquier sitio. Hay puntos de fricción por la velocidad de algunos usuarios, moverse en dirección contraria, e ir por las aceras. Hay que mejorar la señalización y la presencia policial. Se está multando bastante, debemos endurecer las sanciones económicas.
–¿Qué novedades presentará la ordenanza de veladores?
–Hay dos novedades fundamentales. La autorización de los veladores será por tres años, y se endurecerá las sanciones hasta el punto de retirar temporalmente una licencia si se acumulan determinadas denuncias. Hay que evitar lo que sucede ahora, que las multas coercitivas quedan compensadas por la facturación del negocio. Espero que tengamos la ordenanza antes del verano.
–Lo más destacado de la Madrugada del año pasado fue el olor a orín, ¿plan preparado?
–Es unas de las cosas que tenemos que corregir de la Madrugada, pondremos más urinarios portátiles. Al salir del Ayuntamiento a las siete de la mañana, pude comprobar la enorme cola que había en la Plaza Nueva. Eso hay que atajarlo. Vamos a colocar muchísimo más servicios. Seguirá primando la seguridad, los negocios deben sacrificarse algunas horas.
–Reducción de sillas en la calle Sierpes, ¿la seguridad antes que el drama familiar?
–La seguridad siempre tiene que ser una prioridad, no solamente en el caso de la Semana Santa, sino en los eventos deportivos, conciertos o cualquier otro que suponga una concentración de gente. Confío en que el Consejo de Cofradías gestione bien la reordenación de las sillas. Soy consciente, porque me lo trasladan algunos vecinos, que está ocasionando algunas molestias, pero confío en que las aguas vuelvan a su cauce y todo el mundo quede satisfecho.
–La serpiente del verano fue la tala del ficus de San Jacinto, ¿fue un error de cálculo?
–De todos estos procesos hay que aprender. Lo único que digo y vuelvo al tema de la seguridad, es que contábamos con unos informes de Parques y Jardines y externos que avalaban el apeo del árbol por su peligrosidad. Si ocurre algo y no hubiésemos intervenido, estaríamos hablando de prevaricación. Ahora bien, puedo reconocer que faltó un poco más de diálogo en la fase de previa a la intervención con los que podían defender otros intereses. Apear un árbol no es un tema caprichoso, en el caso de San Jacinto no había otro camino a la vista de los informes.
41 Comentarios