La Virgen de los Reyes estrenará nueva tumbilla en la magna del 8 de diciembre

A buen seguro una de las estampas históricas de las muchas que nos dejará el Congreso de Hermandades. Con motivo del centenario del estreno del paso de la Virgen de los Reyes diseñado a finales de siglo XIX, el Cabildo Catedral ha encargado la confección de una nueva tumbilla para la patrona, siguiendo el modelo diseñado por Juan Talavera Heredia y realizado en los talleres de bordados Olmo, que se entrenó el 15 de agosto de 1924.

Esta nueva obra, que tendrá uso procesional, posibilitará sobre todo la recuperación del diseño original. También permitirá su almacenaje o exposición con unas medidas adecuadas de mantenimiento. Los trabajos de diseño serán realizados por el dibujante y proyectista Francisco Javier Sánchez de los Reyes.

Asimismo, los bordados se realizarán en el destacado taller Santa Bárbara, actuando como director técnico y artístico el reconocido especialista en bordados en oro, plata y sedas Joaquín López González. El estreno de la tumbilla será el próximo 8 de diciembre con motivo de la procesión de clausura del II Congreso Internacional de Hermandades y Piedad Popular.

¿Por qué de tumbilla?

¿Por qué se denomina de tumbilla a esta tipología de pasos de palio? En primer lugar, el palio en sí es un símbolo directo que indica al fiel la presencia de la divinidad. Ocurre con el Santísimo, con nuestras imágenes marianas (puesto que la Virgen es el primer Sagrario de Cristo, y como tal representa también la presencia de la Sagrada Forma) y ocurría en otras religiones y civilizaciones, como en el Antiguo Egipto.

El paso del tiempo, naturalmente, ha ido modificando la estética de estos atributos pero su significado litúrgico se mantiene invariable.

Según apunta Reyes Pro, licenciada en Filosofía y Letras y Geografía e Historia, la tumbilla era un antiguo artilugio presente en zonas de climas fríos que se empleaba para calentar las camas y los dormitorios.

Este artefacto en concreto consistía en una estructura convexa "que cobijaba un braserillo y que se metía entre las sábanas. Puede que nombre derive del hecho de que la forma podía recordar la de una pequeña tumba y que evocase la del templete o baldaquino que cobijaba la imagen de la Virgen antiguamente".