El Señor de la Presentación de San Benito tendrá una nueva túnica bordada

La pieza será confeccionada con motivo del cincuentenario del grupo joven de la cofradía

Será ejecutada en el taller de Jesús Rosado y diseñada por Javier González

La Corona pasa a formar parte de la nómina de las hermandades de Gloria de Sevilla

El diseño de la nueva túnica, la cuarta bordada que poseerá el Señor
El diseño de la nueva túnica, la cuarta bordada que poseerá el Señor

Un paso más en materia patrimonial por el barrio de la Calzá. La hermandad de San Benito firmó este pasado martes, en sus dependencias, el contrato de ejecución de una nueva túnica bordada para Nuestro Padre Jesús de la Presentación al Pueblo. La pieza se confeccionará con motivo del cincuenta aniversario de la fundación de la juventud de la hermandad, grupo impulsor de este proyecto que verá la luz en los próximos meses.

El diseño de la misma corre a cargo de Javier González Castellano, hermano de la corporación, y será ejecutada en los talleres astigitanos de Jesús Rosado. Además, está siendo costeada gracias a las donaciones efectuadas por los hermanos y devotos del Señor, y en buena medida al trabajo del grupo joven.

La pieza presenta bordados en las mangas y en los bajos, que es realmente de lo que se compone la túnica en sí, atendiéndonos al pasaje que se representa y a la imagen a la que irá destinada, que se nos muestra con el torso descubierto. Como novedad, y siguiendo el diseño, la obra será bordada sobre terciopelo morado, una tonalidad inusual en el ajuar que posee la talla de Castillo Lastrucci. El Señor de la Presentación cuenta con hasta tres túnicas bordadas. La más antigua es la de Rafael Peris, datada en 1935, originalmente de terciopelo granate bordada en oro en su perímetro inferior y mangas. El bordado se compone de una fina cenefa con motivos vegetales de corte barroco. A finales del año 1993 fue restaurada y pasada a nuevo terciopelo de tonalidad burdeos en los talleres de Fernández y Enríquez.

Luego está la de José Guillermo Carrasquilla, bordada en oro en su perímetro inferior y mangas, según un diseño de estilo barroco del ceramista Juan Oliver Míguez, compuesto por tallos vegetales entre los que se intercalan jarras florales. Sobre el borde se dispone una cenefa decorada de nuevo con motivos vegetales y roleos. Fue estrenada el Martes Santo de 1965. Y por último, la de Mariamo Martín Santonja, bordada en oro fino sobre terciopelo burdeos en su parte inferior y mangas. Presenta un diseño basado en una ornamentación de lacería entrelazada y motivos de inspiración mudéjar.

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