Pascual González dejó escrita una obra inédita para el Señor del Gran Poder

El alma del grupo Cantores de Híspalis, Pascual González, dejó escrita una obra dedicada al Señor del Gran Poder, que no se pudo estrenar por la pandemia del Covid-19, y que sigue "en un cajón" tras la muerte de su autor en febrero de 2022, según ha desvelado el compositor sevillano David Hurtado.

En su cuenta de X Hurtado, que trabajó con Pascual González en este proyecto, denominado Hombre y Dios, ha definido la historia como una de las que guarda "en uno de los cajones predilectos" de su corazón.

"El 5 de noviembre de 2016, el Señor del Gran Poder volvía a su Basilica tras haber protagonizado una salida extraordinaria con motivo del año de la Misericordia", ha recordado Hurtado, que no fue a verlo para poder visitar a Pascual, "que acababa de regresar del mismo infierno al que la vida a veces te arroja inmisericordemente", tras ser operado de un cáncer de laringe.

Ha relatado que en el hospital Pascual González se dejó "literalmente, su segundo bien más preciado: su voz", y entonces "se comunicaba a través de un cuaderno en el que escribía apresuradamente lo que quería decir", y tras contarse "más penas que alegrías" le dijo que "no había ido a ver al Señor porque le había pedido permiso para verlo a él".

"Le dije también, así sin anestesia, que estaba componiendo una obra sinfónica coral al Gran Poder, inspirada en el propio periplo vital suyo (de Pascual), ya que estaba transitando su personal vía crucis", ha contado Hurtado, que Pascual debía ponerle texto a aquella música.

Ha rememorado que el compositor sevillano "se echó a llorar" y a los pocos días le envió la letra, "hermosa, chispeante y con una profundidad nueva en él, propia de alguien que ha regresado victorioso, pero tocado, de una experiencia extrema", y que ha calificado como "un texto magnífico que se ajustaba como un guante a mi música".

Días después volvieron a verse para escuchar el resultado final y Pascual le transmitió "que era su deseo que esa obra fuera a partir de entonces el epílogo de su magno espectáculo Cristo: Pasión y Esperanza, con fecha prevista de grabación para el 14 de marzo de 2020,"pero se declaró el estado de alarma y todo se fue al garete", ha indicado David Hurtado.

La obra "se metió en un cajón, a la espera de un momento que nunca llegaba, y así, pasando el tiempo, Pascual nos dejó en febrero de 2022", y en ese cajón sigue, sin saber "si alguna vez saldrá", aunque Hurtado ha precisado que tendría que ser para una ocasión muy especial porque no quiere estrenarla "de cualquier forma, y menos estando dedicada a quien lo está".

El músico sevillano ha señalado que no sabe si la obra "verá la luz", pero que tanto Pascual González como él se volcaron en su composición "por diversos motivos", y ha concluido que encomienda al Gran Poder que sea "quien decida, modestamente, el destino de esta obra".