Palacio aprueba la salida extraordinaria del Inmaculado Corazón del Claret para octubre de 2024

2024 será, sin duda, un año extraordinario, especialmente en su tramo otoñal. Palacio ha autorizado la salida extraordinaria del Inmaculado Corazón de María, de la hermandad de la Misión, con motivo del 75 aniversario de la fundación de la corporación. La procesión tendrá lugar el próximo 5 de octubre de 2024, con horario e itinerario aún por definir. Esta extraordinaria se suma a las ya conocidas de la coronación de la Piedad del Baratillo, los Estudiantes y la Estrella, todo ello condensado en cuestión de dos meses.

La Archicofradía del Inmaculado Corazón de María, desde su fundación en la Parroquia de Nuestra Señora de las Victorias de París el 11 de diciembre de 1836, se fue extendiendo por todo el mundo, llevada de la mano de los Misioneros del Inmaculado Corazón de María.

Concretamente en Sevilla, se establecen en la Capilla de la Puerta de Jerez, desde 1907 hasta 1940, año en que los Misioneros Claretianos dejaron la Capilla. El día 2 de mayo de 1940 los Misioneros Claretianos llegan a la barriada de Heliópolis de Sevilla. Los Superiores de la Comunidad solicitaron al Sr. Arzobispo, por tres veces, permiso para el establecimiento de la Cofradía del Inmaculado Corazón de María en la Iglesia de su residencia del barrio de Heliópolis.

El 15 de julio de 1948 el Sr. Cardenal de Sevilla concede “autorización y licencia” para que el Superior de los Misioneros Hijos del Inmaculado Corazón de María estableciera la Cofradía en el barrio de Heliópolis, “ateniéndose a las facultades que tiene de la Santa Sede y en conformidad con las disposiciones canónicas”.

Por deseo expreso y celo apostólico de dos Padres Misioneros se lleva a cabo la reorganización, teniéndose los primeros contactos con un grupo de seglares el día 15 de octubre de 1948, fecha en que la Archicofradía tuvo la primera reunión de la entonces Junta reorganizadora, que luego pasó a ser efectiva. Los días 11 y 20 de febrero de 1949 tuvieron lugar las primeras reuniones de la Hermandad, procediéndose en la última reunión a la “lectura de los Estatutos y prácticas religiosas de la Archicofradía, los que son aprobados por unanimidad”. En el mes de octubre de aquel mismo año se aprueban las Reglas.