Nueva publicación sobre el monasterio de Santa Inés de Sevilla

Un libro misceláneo que no sólo pone de relieve la importancia del patrimonio artístico del monasterio de Santa Inés, sino que al hacerlo también proyecta la historia de la ciudad de Sevilla con una síntesis expositiva e investigadora de fácil y amena lectura, en contemplación de lo hermoso y bello. Así es la nueva obra El Real Monasterio de Santa Inés de Sevilla. Notas histórico-artísticas del monasterio y su iglesia, realizado por Salvador Guijo Pérez, doctor internacional en Historia y Estudios Humanísticos por la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla (2018), que se ha publicado bajo el mecenazgo de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla y que posee un magnífico aparato fotográfico de Daniel Salvador-Almeida González. La obra se suma a las ya publicadas anteriormente por el mismo autor de los monasterios de San Leandro y Santa Paula.

El monasterio de Santa Inés de Sevilla, de religiosas clarisas, es uno de los más importantes de la ciudad, con una historia fecunda y rica en la que no faltan las leyendas, como la de Maese Pérez El Organista, de Gustavo Adolfo Bécquer. Por ello, "la obra se abre con un muy necesario capítulo sobre la historia del monasterio que nos situará en el espacio y en el tiempo de Doña María Coronel, su fundadora, o mejor dicho, en los espacios y en los tiempos de las distintas comunidades que la rama femenina de la orden de Santa Clara ha conocido en la ciudad de Sevilla. Además, realizando un ejercicio de introspección y proyección, se nos situará en el núcleo de influencias mutuas entre el monasterio y la sociedad hispalense en todos los engranajes que articulaban su vida cotidiana", explica el autor.

A continuación, se presenta el primer catálogo en una apertura sin precedentes de las puertas monásticas, como siempre, para ofrecer al lector la riqueza de su patrimonio con su espectacular colección hagiográfica de representaciones franciscanas y dominicanas, titulado Hagiografía mendicante. Un segundo capítulo nos introducirá en la documentación artística sobre el patrimonio inmueble y mueble del monasterio donde se pretende que el lector vaya más allá de la obra artística y reflexione sobre lo que ve. "Los Coronel lo fundaron y el Divino Cordero lo edificó, en alusión al agnus, Inés y las aportaciones que otras religiosas de este monasterio hicieron desde entonces hasta nuestros días. Y es que toda obra artística responde a los gustos y estilos de una época, pero sin duda hay un componente humano que justifica que esté donde lo hace, que sus características formales sean esas y no otras, o que la mano que la ejecutó pertenezca a un artista concreto".

Tras un segundo catálogo sobre los bienes suntuarios del convento, bienes recibidos a partir de donaciones y dotes de las religiosas entrantes a través de los siglos, se abre el tercer y último capítulo que nos muestra un patrimonio perdido que constituyó la gloria y esplendor de un monasterio medieval erigido como de los más importantes de la ciudad de Sevilla. "Pero lo hacemos desde la esperanza de un futuro en eclosión y así lo manifestamos titulándolo como El trinfo de las Damas Pobres: la supervivencia contemporánea.

"Nuevamente, nos reunimos por tercer año consecutivo, hablando de monasterios y conventos. Y es que estos representan un legado cultural y religioso tan importante para nuestra ciudad que constituyen una seña de identidad propia. A través de sus fuentes documentales, materiales, librarias y artísticas es posible potenciar la catalogación, la descripción y el estudio de espacios de espiritualidad y, al mismo tiempo, fomentar el debate interdisciplinar sobre el papel de los cenobios en los distintos procesos que influyeron en la formación de una identidad europea a lo largo de los siglos", destacó Guijo durante la presentación de esta obra.

El origen del monasterio de Santa Inés se sitúa dentro de la reforma que se promovió en la propia orden entre los siglos XIV y XV. Durante la estancia de los visitadores de la Segunda Orden de San Francisco en Sevilla, la ilustre doña María Coronel presentó su proyectó fundacional. Esta que era religiosa profesa de la orden, tenía el respaldo del caudal económico y el posicionamiento social de su familia en la ciudad, viéndose beneficiada en su empresa religiosa por el deseo de restauración que existía dentro de la propia orden.