Las estampas inolvidables que dejarán los itinerarios de la magna de Sevilla

Congreso de Hermandades

Varios cortejos de la capital pasarán por enclaves del todo inéditos

Las imágenes de la provincia también asumen un atractivo esencial

Las Siete Palabras ejecutará un altar para el cuadro de la Virgen de los Remedios en su capilla

El Señor del Gran Poder pasará ante la iglesia de la Magdalena en la tarde del 8
El Señor del Gran Poder pasará ante la iglesia de la Magdalena en la tarde del 8 / Juan Carlos Vázquez

La ciudad de Sevilla -y prácticamente el universo cofradiero- afrontará y disfrutará unas frenéticas horas de procesiones que pasarán, Dios lo quiera, a los anales de nuestra historia, y nadie querrá perderse un acontecimiento de envergadura desconocida a tenor del contexto actual en que se desenvuelve la religiosidad popular. Es cierto que antaño se han convocado procesiones de este tipo, y que son varios Santo Entierros Grande a lo largo del último siglo y medio, pero en esta ocasión se concentran una serie de ingredientes que confluyen en un verdadero hito. 

Hablamos, efectivamente, de la procesión de clausura del II Congreso Internacional de Hermandades, a celebrar el próximo 8 de diciembre en la capital andaluza. Devociones de calado universal y otras tantas de hondo arraigo en la provincia se darán cita en el centro de la ciudad durante varias horas, incluso en las vísperas de la propia "magna". En estas últimas horas hemos conocido los horarios e itinerarios oficiales de esta procesión y de los traslados previos, que sin duda nos arrojarán estampas absolutamente inéditas que se recordarán siempre. 

A las tres de la tarde del sábado 7 de diciembre se abrirán las puertas de la Capilla de los Marineros. La Esperanza de Triana marchará a la Catedral de Sevilla por un itinerario familiar pero en un horario relativamente novedoso, puesto que se recordará de alguna manera la ida del 600 aniversario bajo el sol de la tarde por el puente. La visita al Baratillo tras discurrir por Pastor y Landero dará paso a la Puerta del Arenal y la calle García de Vinuesa, por la que ya discurrió en 2018, al igual que la calle Alemanes. Esta última sí será totalmente novedosa para el Cachorro, que saldrá una hora más tarde desde su Basílica (a las cuatro de la tarde) y entrará por la Puerta de los Palos a las 21:00 de la noche. El Cristo de la Expiración prácticamente seguirá los pasos de la Esperanza una vez cruce a Sevilla y resultará atractivo su tránsito frente a la Puerta del Perdón del Patio de los Naranjos. 

Una vez estén estos dos primeros pasos en la Catedral, las miradas se dirigirán al norte del casco antiguo, donde se respirará atmósfera de Viernes Santo. A las doce de la noche se abrirán las puertas de la Basílica para que salga la Macarena y, como curiosidad, y siempre que la caprichosa meteorología lo respete, se estrenará el itinerario previsto para la pasada Madrugada, es decir, tomar buena parte de la Alameda tras abandonar Relator. Por supuesto, el tránsito por O'Donell, la Plaza de la Magdalena y Méndez Núñez, zona más habitual de cofradías trianeras o del Arenal y que se antoja histórico para este paso de palio. Mismo caso para el Gran Poder, que saldrá casi siete horas más tarde (a las 6:45) para discurrir por este mismo entorno, y así salvar la iluminación navideña.

La jornada del 8

El día 8 de diciembre, a las cuatro de la tarde, se abrirá la Puerta de Palos y comenzará el discurrir de una procesión a todas luces sin parangón por el itinerario ya conocido, y por supuesto insólito para todas las participantes, sobre todo el Paseo de Colón. Deteniéndonos en las particularidades de cada una de las participantes, la Virgen de los Reyes regresará a la Catedral por el corazón del Arenal: Antonia Díaz y García de Vinuesa, por las que no ha pasado jamás desde que se cuentan con registros históricos, puesto que su procesión del 15 de agosto mantiene invariable su itinerario. Jesús del Gran Poder cruzará por completo Reyes Católicos, pasará ante la iglesia de la Magdalena y a partir de ahí tomará por un itinerario algo más familiar, y que nos devolverá aquella noche de noviembre tras la Misión de 2021.

El caso de las corporaciones de la provincia es algo absolutamente imprescindible de presenciar, desde el principio hasta el fin de sus respectivas procesiones. Probablemente se nos antojaría totalmente inverosímil y ficticio expresar la frase: "la Virgen de Setefilla está en estos momentos en la Campana". Efectivamente, la patrona loreña contará un itinerario muy destacado debido a su tránsito por entornos clave, como la Plaza Nueva, Tetuán, la Campana o Villasís hasta alcanzar San Andrés. La Virgen de Consolación de Utrera, que también pasará por la señera Campana, nos ofrecerá una de las estampas de la madrugada cuando visite, en su regreso a Los Terceros, el convento de Santa Ángela de la Cruz y la cofradierísima calle Gerona. Para anotarlo. Sí nos resultará más "cercano" ver a la Virgen de Valme por Sevilla tras la extraordinaria del año pasado, pero se revela muy esperado su paso por Santas Patronas, el Arenal o la Cuesta del Bacalao para llegar a una Plaza del Salvador colmatada de luces navideñas.

Cerrarán esta serie de estampas inéditas las restantes de la capital. El Cristo de la Expiración llegará hasta Santa Cecilia, un entorno donde goza de acreditada devoción, para posteriormente buscar la zona de los Tejares o calles como Numancia, antes de alcanzar nuevamente Castilla. La Esperanza de Triana volverá a visitar la O y la hermosa calle Alfarería (recuerdos de aquella vibrante e inolvidable madrugada de 2009 con motivo del XXV aniversario de su coronación canónica) y la Macarena, tras pasar ante el antiguo convento de San Pablo -otro itinerario muy trianero-, buscará emular en un alto porcentaje el itinerario de aquella frustrada Madrugada del año 2013, a través de Santa María de Gracia, Tarifa, Amor de Dios y la Correduría. Tras la apoteosis que se espera en la calle Parras, será muy significativo el discurrir por la calle Muro, de hondo sabor macareno, sin necesidad de rematar con Fray Luis Sotelo y la Resolana.

Todo apunto para vivir unas horas frenéticas que, Dios mediante, pasarán a formar parte de la historia de la ciudad de Sevilla y su provincia.

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