La capilla de la hermandad de las Cigarreras es una realidad casi 60 años después de llegar a Los Remedios

Desde su fundación en 1563 en el convento de San Benito (actual iglesia de Nuestra Señora de Belén), la hermandad de las Cigarreras ha tenido diez sedes. A partir de ahora la antigua capilla de la Fábrica de Tabacos de Los Remedios es propiedad de la corporación del Jueves Santo. Hace 59 años que tabacalera y su cofradía cruzó el puente y se convirtió en la primera hermandad situada en ese nuevo barrio que era Los Remedios. Ha pasado mucho tiempo desde la primera salida de Jesús Atado a la Columna y María Santísima de la Victoria desde la capilla de ladrillos, tanto que ya hace años, desde 2007, el complejo que había sido Tabacalera y pasó a llamarse Altadis, dejó de fabricar cigarrillos. Lo único que ha permanecido desde entonces es la devoción que se ha ido abriendo camino en Los Remedios.

Ahora se ha hecho realidad una aspiración que desde el primer día tuvo la hermandad: la titularidad de la capilla. Ante el notario Manuel Ramos, el presidente de KKH Property Investors, Josep María Farré, y el hermano mayor de las Cigarreras, José García Pastor, han firmado la donación gratuita de la propiedad de la capilla en un acto que ha estado presidido por el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz y que ha contado con la presencia de un nutrido grupos de concejales del PP, PSOE y Vox, además del presidente de la Autoridad Portuaria, el viceconsejero de Economía, el delegado territorial del Banco de Santander o el presidente de la Cámara de Comercio, entre otros, además de representantes de las hermandades y del Consejo de Hermandades y Cofradías.

El presidente del grupo KKH, que es quien tiene la propiedad de los antiguos terrenos de Altadis, Josep-María Farré Viader no tuvo ninguna duda. "Es una maravilla teneros de vecinos", dijo al José García, hermano mayor de las Cigarreras. Con la cesión de los 1.221 metros cuadrados destinados no solo al culto sino también a las dependencia sociales de la corporación, se da un simbólico primer paso de la unión del proyecto de KKH en Los Remedios con el barrio y una ciudad "que está abierta a la inversión y a los nuevos proyectos que la situará entre las ciudades más importantes de Europa", aseguró Farré.

Un complejo terminado entre finales de 2025 y 2026

El trabajo que KKH está realizando en esta zona de la ciudad "abrirá los terrenos de la fábrica al barrio, creando una nueva puerta al río que conectará a los vecinos con las Delicias y San Telmo ofreciendo nuevos espacios como parques y zonas de actividad empresarial y turística, además de dos parkings". Asimismo recordó la creación de empleo, "porque la carga de trabajo irá aumentando a medida que se incremente la zona de obras. De este modo llegará un momento en que haya unos 400 obreros en el hotel y 300 en el resto del complejo", explicó Farré, que señaló que la inauguración de las primeras zonas podría ser a finales de 2025 y el resto en 2026.

Un desarrollo urbanístico del que se beneficiará la capilla como la construcción de una nueva plaza pública con equipamientos de titularidad municipal; un hotel de cinco estrellas y de la remodelación del viejo edificio de la fábrica , que se convertirá en equipamiento -El Cubo- y por último, de otros tres edificios para oficinas en los viejos almacenes del tabaco. Todo el proyecto de rehabilitación de la antigua fábrica de tabacos ha sido declarado de interés empresarial estratégico por la Junta de Andalucía.

El presidente de KKH agradeció a la corporación municipal los tres años y medio de "apoyo, respeto e impulso" que ha encontrado desde que se puso en marcha el proyecto en los antiguos terrenos de Altadis. Por su parte, José Luis Sanz, recordó la importancia del proyecto no sólo para la hermandad de las Cigarreras y Los Remedios, sino para la ciudad con una nueva zona que supondrá "una ventana abierta más al río y el pistoletazo de salida a un desarrollo urbanístico fundamental para la ciudad, que además crea empleo".

Una jornada histórica que contó con "el mejor de los testigos", el Cristo Atado a la Columna -que cumple los 50 años de la hechura - que aún presidía el altar de quinario, delante del cual estaba colocada la mesa donde se firmó la escritura de cesión de la capilla. A su lado, la Virgen de la Victoria vestida de hebrea, con un tocado realizado a partir de un pañuelo traído desde Israel. "Con esta cesión se pone fin a 120 años de precariedad que comenzó cuando nos trasladamos desde que en 1904 se trasladaron a la Capilla de la Real Fábrica de Tabacos, actualmente sede de la Universidad de Sevilla", afirmó José García. El hermano mayor de las Cigarreras agradeció a Josep Farré la "especial sensibilidad que tiene con la hermandad, siempre receptivo y que ha solventado todos los obstáculos que se presentaban" y al Ayuntamiento la colaboración "sin la que no habría podido llegar este momento". Con esta cesión "no sólo se adquiere la propiedad de la capilla, sino que formará parte del proyecto urbanístico más importante de los últimos años en la ciudad", afirmó el hermano mayor.