La Semana Santa 2019 a través del filtro vintage del carrete
Sebas Gallardo ha decidido disparar fotografías con su cámara analógica en plena era digital.
Sebas Gallardo, algabeño enamorado de las cosas de Sevilla, se auto-define como "un melancólico". Le apasiona lo añejo y lo que tiene sabor a las cosas auténticas, hasta tal punto que se desplaza en una vespa tan veterana que se libra de pagar el "sellito". Este año ha decido volver al carrete, sí, a la película enrollada que se metía en las antiguas cámaras y cuyas instantáneas no veías hasta que revelabas el negativo. Qué tiempos. "En mis ratos de inspiración tiro de película; la fotografía que se realiza en esta disciplina es pensada y te hace pensar cada escena componiéndola con más detenimiento", comenta Sebas.
El mercadillo de la calle Feria es una buena oportunidad para saborear una Sevilla envejecida que se derrama por los suelos en forma de estampas, vinilos, libros, o espejos antiguos en los que cada jueves se refleja la cerveza, el vermut y los manises de Casa Vizcaíno. En esos mediodías Sebas comparte opiniones y visiones con fotógrafos como José Antonio Zamora o Antonio Sánchez Carrasco entre otros, grandes conocedores de la fotografía analógica. Gallardo atesora una colección completa de diapositivas, en las que pueden verse estampas de la Semana Santa de los años 80, entre otras piezas de gran valía fotográfica.
Si miramos sus estanterías ya observamos que es un hombre meticuloso y ordenado, condiciones que aplica también en sus fotográficas, dignas de ver. Entre sus paredes y repisas se mezclan sus devociones: el Gran Poder de Sevilla, Jesús Nazareno y la Concepción Coronada de la Algaba; y algunos de sus reconocimientos personales de diferente índole. "Conservo cada una de las cámaras que han pasado por mis manos, todas me han aportado historias y requieren mi homenaje".
Gallardo recuerda una por una las fotografías disparadas por él desde que comenzó en esta afición. "Mi primera cámara me la regalaron en 1992, fue una Olympus Trip MD2, y el primer reportaje que hice fue a los amigos de mi clase de séptimo de EGB en una excursión que hicimos a Aljarafesa". "Revelé en los 90 con químicos reveladores y ampliadoras, en clase. Ahora estoy adquiriendo poco a poco el equipo necesario para hacerlo en casa, son herramientas muy costosas y hay que invertir bastante".
Las últimas fotografías que disparó en carrete son del año 2008, con una Canon 1000FN, y las próximas serán la semana que viene, tanto en Sevilla como en su localidad, la Algaba, con una Canon A1 y una Polaroid. "La fotografía analógica nunca pasará de moda porque nunca lo estuvo", afirma Sebas. Esperemos que antes de que se alumbren los farillos de la feria de abril podamos ver cómo se ve la Semana Santa 2019 con el filtro vintage de los 80 y 90.
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