La preparación de la Semana Santa de Sevilla arranca con incertidumbre

Cuando faltan tres meses para el Domingo de Ramos, las especulaciones sobre la posibilidad de que la Semana Santa de Sevilla se celebre con el formato conocido hasta 2019 están a la orden del día. Especialmente si se tiene en cuenta la actual situación sanitaria, marcada por la sexta ola del Covid, que ha disparado los contagios.

La Junta de Andalucía no se ha quedado al margen de las declaraciones realizadas los últimos días sobre esta fiesta religiosa. A primera hora de la mañana de este martes, el vicepresidente andaluz y consejero de Turismo, Juan Marín (que requirió un ingreso hospitalario horas después), defendió que la Semana Santa de 2022 se celebre con “normalidad” y que las cofradías salgan a la calle, aunque, eso sí, tendrán que realizar cambios en los itinerarios para ajustarse a las restricciones y las medidas sanitarias.

Para apoyar esta postura, Marín argumentó que “si Andalucía ha sido capaz de tener cabalgatas de Reyes, hay que apostar por que la Semana Santa se lleve a cabo con normalidad y atendiendo a las instrucciones de las autoridades sanitarias”.

Entre el 10 y 17 de abril

La próxima Semana Santa tendrá lugar entre el 10 y el 17 de abril y este año será como “habitual y tradicionalmente se viene desarrollando”, declaró el vicepresidente de la Junta en una entrevista en Canal Sur Radio. “Confío en que los cofrades se preparen para ello y a lo mejor hay que hacer cambios en los recorridos, pero creo que se celebrará con total normalidad”, abundó.

El vicepresidente añadió que los contagios de esta sexta ola siguen tendiendo a la baja y la presión hospitalaria “se mantiene en un nivel razonable”, lo que aporta más razones para que se pueda planear ya la celebración religiosa. De igual manera, se mostró partidario de establecer de “manera permanente” el pasaporte Covid como una tarjeta sanitaria para España y Europa. También criticó a los que se dedican a crear “alarmismo”.

Moreno llama a "la prudencia"

Sin embargo, estas declaraciones tan optimistas sobre la próxima Semana Santa fueron matizadas pocas horas después por el presidente de la Junta, Juanma Moreno, quien, al ser preguntado en Almería por esta cuestión, señaló que “es imposible afirmar qué va a pasar dentro de dos meses y medio como para decirlo con rotundidad”.

Moreno expresó “su deseo de manera entusiasta de que se celebre porque soy cofrade”, aunque pidió prudencia a este respecto. “Vamos a ser prudentes”, reclamó ante la hipótesis de que “pueda aparecer una nueva cepa”, en referencia a la irrupción de la variante ómicron, que, en su opinión ha marcado las pasadas fiestas: “las Navidades nos las ha echado a perder”.

El mandatario andaluz hizo hincapié en la situación actual, marcada por la sexta ola, “con una enorme intensidad de contagios”, pero cuya incidencia se ha rebajado “gracias a las vacunas, a la ciencia”.

Moreno sí coincidió con Marín en señalar que el Gobierno andaluz no prevé ninguna medida restrictiva a corto y medio plazo. También se mostró partidario de establecer de manera permanente el pasaporte Covid.

Las declaraciones de Moreno y Marín se producen a tres meses de un nuevo Domingo de Ramos y después de que el pasado lunes el alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, afirmara que “algo extraordinario” debería ocurrir para que en 2022 no hubiera Semana Santa ni Feria.

Primeras papeletas de sitio

Más allá de las declaraciones de los políticos, las hermandades continúan con su calendario de cultos y actos preparativos para la próxima Semana Santa. El mismo lunes la Hermandad del Amor comenzó con el reparto de papeletas de sitio para la estación de penitencia.

Unos preparativos que incluyen las igualás de costaleros, que tienen lugar en estas fechas, previas a los ensayos. En algunas corporaciones se han aplazado ante la situación sanitaria. También en otras ciudades ha tenido que posponerse los actos previstos por la incidencia del Covid, como ha ocurrido en Málaga con la presentación del cartel oficial que anuncia su Semana Santa.

Por tanto, este 2022 ha comenzado con un periodo de incertidumbre, a la espera de que la sexta ola remita y se pueda planificar con mayor certeza la celebración que arrancará el 10 de abril.