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Charo Padilla y el reportaje de su vida

Pregón de la Semana Santa 2019

La periodista pronuncia un Pregón plagado de emotividad que ha durado una hora y veinticuatro minutos

Charo Padilla durante el Pregón de la Semana Santa de Sevilla 2019 / Juan Carlos Vázquez

"Sevilla es una cara morena a la que mi madre rezó". Con esta alusión a la Macarena, tras lamentarse en un sueño por no poder contar en el reportaje soñado quién y cómo había tallado a la Virgen de la Esperanza, concluyó el Pregón de la Semana Santa de 2019 pronunciado por Charo Padilla. Fue un Pregón cargado de emoción, de vivencias, de autenticidad. El de la primera mujer pregonera de la Semana Santa de Sevilla, que regaló pasajes antológicos, como la narración del regreso de la Macarena a su basílica, en el que transportó a todos, los presentes en el teatro y los que seguían el acto por la radio o la televisión, hasta la misma delantera del paso de palio mientras la Banda Sinfónica Municipal de Sevilla encadenaba fragmentos de marchas macarenas. Fue el momento más celebrado.

El Pregón se ajustó perfectamente al tiempo, como pretendía la pregonera (duró apenas una hora y veinticinco minutos), y consiguió lo que desde el principio era la intención de Charo Padilla: "Quiero que os suena a la Charo de siempre", había repetido una y otra vez desde que fue nombrada. Y vaya si fue la Charo Padilla de siempre. La que sabe contar como nadie cómo es la labor callada que realizan en el Polígono Sur. La que emociona en la retransmisión de la salida de la Hermandad del Cerro del Águila, porque, aunque nacida en la calle Sierpes y bautizada en el Salvador, "una es de donde la hacen sentir como en casa", y así sucede cada Martes Santo. Fue la Charo Padilla que sabe moverse como nadie entre la bulla que presencia una entrada para lograr la mejor entrevista. La que sólo ella ve...

Las imágenes del Pregón de la Semana Santa de Sevilla 2019 / Juan Carlos Vázquez

La Sevilla cofradiera estaba expectante por el estreno de una mujer tras el atril del Maestranza. La tarea no era menor. De puerta grande o enfermería. Fue lo primero. A la pregonera se la vio relajada desde el primer momento. Tenía claro lo que tenía que hacer. Comenzó pidiendo la venia, "para anunciar el alma de la ciudad", con esa voz tan familiar. Tan de Domingo de Ramos. De la salida de la Redención o de la Macarena. De tantos y tantos reportajes de cuaresma. "Entro en vuestras casas con humildad. Mi voz no es extraña". La pregonera se presentó, "como uno de los vuestros", dispuesta a anunciar la Semana Santa, la película de la vida de los sevillanos.

Fiel a sí misma

El éxito de un pregonero es ser fiel a sí mismo. Y Charo Padilla lo fue de principio a fin. Comenzó igual que terminó: con su madre y la Virgen de la Esperanza. "En la cara de la Macarena están las miradas de mi madre. Por eso hoy sigue viviendo en ella", dijo tras narrar su primer recuerdo de las cofradías, un Jueves Santo por la mañana.

La pregonera fue desgranando el reportaje de su vida. Su mejor crónica. Las historias y las vivencias se fueron sucediendo. Del Polígono Sur, uno de los lugares donde se ha encontrado con Dios, pidiendo un aplauso para esos músicos de la banda del Proyecto Fratérnitas; a Triana, con la emoción de Carmen Medina Rodríguez, la niña que con 70 años vio cumplido su sueño de salir de nazarena una Madrugada con el recuerdo de la madre que nunca pudo.

Una de las primeras experiencias de la pregonera como periodista fue la de narrar la salida de la Hermandad del Beso de Judas. Metáfora del tiempo y de la vida. El crecimiento de la cofradía y el suyo propio. Arrancó la sonrisa del público al narrar cómo su marido, el músico Manuel Marvizón, le pidió la mano a su hermano costalero un Lunes Santo tras salir de la trabajadera o cómo, esa misma Semana Santa, tuvo que afanarse en darle cable a la reportera que buscaba la entrevista en la entrada de los Servitas. "La Semana Santa es el libro de nuestra vida. Marca nuestra existencia. Vivimos por y para ella. Los nuestros siempre vuelven a estar con nosotros en Semana Santa".

La pregonera saluda el alcalde antes de ponerse tras el atril. / Juan Carlos Váquez

El barrio del Cerro del Águila y Angustias no faltaron en el Pregón de Padilla. Retransmisión emocionada desde el corazón: "Si Dios es amor, tú eras la mejor prueba". La pregonera habló de la importancia de la familia deteniendse en la Hiniesta, donde sus hijos Manuel y Sofía vistieron la túnica por primera vez, y defendió la importancia de las hermandades y las familias sevillanas para la transmisión de la fe. "Ser buenos cofrades es la mejor forma de ser católicos en Sevilla". La innovación llegó a la hora de desgranar los sonidos de la Semana Santa con los pasos del racheo del Gran Poder mientras se acordaba de todas las personas anónimas que salen a su encuentro.

El momento más celebrado del Pregón fue la narración que hizo de su caminar junto al paso de palio de la Macarena una Madrugada. Recreó con absoluta maestría hasta el silencio que se produce en el público cuando se arría el paso de la Virgen de la Esperanza. "Se ve a la Esperanza con los ojos, se la mira con el corazón. Y se le reza siempre con el alma". La figura del capataz Luis León estuvo muy presente. Su manera de arengar a los costaleros: "¡Benditos sean ustedes y la madre que os parió, Macarena también!".

La Banda Sinfónica Municipal de Sevilla fue encadenando fragmentos de distintas marchas macarenas -Esperanza Macarena, Coronación de la Macarena, Esperanza, Aniversario Macareno, Pasa la Macarena...- La pregonera había conseguido trasladar a todos hasta las mismas plantas de la Macarena. "La Macarena es el tiempo que nunca pasa, el tiempo que se detiene, el tiempo que vuelve".

La pregonera, Charo Padilla, recibe emocionada el aplauso del público y las autoridades. / Juan Carlos Vázquez

El Pregón encaró su recta final con una descripción de lo que está por venir recordando a personas que ya no están antes de recordar todo lo que las cofradías han regalado a la pregonera a lo largo de su vida. "Soy la mujer a la que dijeron: 'Vamos a llevar la cuaresma a las casas".

El final fue para el reportaje soñado e inalcanzable. La gran exclusiva: ¿quién y cómo se esculpió la Macarena? Sin respuesta y tras despertar de un sueño de ángeles, con el efecto del piano, la pregonera siguió soñando mientras todo volvía a empezar: "Soy la mujer que un día, en un sueño, pregonó: Sevilla es una cara morena a la que mi madre rezó".

La pregonera se ha llevó una grandísima ovación cuando finalizó su intervención a las 13:57.

Vea el vídeo del Pregón de la Semana Santa de Sevilla 2019

Todas las imágenes del Pregón de Charo Padilla en el Teatro de la Maestranza

Despedida con gratitud y reconocimiento a las cofradías

El delegado de Fiestas Mayores, Juan Carlos Cabrera, realizó una presentación de la pregonera, Charo Padilla, despidiéndose agradecido con las hermandades y las instituciones por el cariño cosechado durante los últimos cuatro años. A la espera de lo que pase en las elecciones municipales de mayo, Cabrera leyó un extenso texto, que dedicó al recientemente fallecido Rafa Serna, realizando una firme defensa de las hermandades y la Semana Santa, "una parte fundamental de la ciudad y eje vertebrador de sus barrios". Volvió a pedir altura de miras para alcanzar los acuerdos necesarios de futuro y defendió las medidas tomadas para preservar la Semana Santa. Cabrera se mostró muy contento por poder presentar una mujer, algo que él pidió hace cuatro años en ese mismo atril.

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