Pérdidas notables en las Cigarreras

La mayoría de imágenes titulares que se han sustituido en la historia de la Semana Santa se debe a hechos sobrevenidos, como incendios, que depararon la pérdida de grandes obras de arte. En ocasiones, las hermandades se han deshecho voluntariamente de sus tallas, ya sean titulares o secundarias. En estos casos, el profesor de Historia del Arte de la Universidad de Sevilla Andrés Luque asegura que "no ha supuesto grandes pérdidas patrimoniales, aunque eso no significa que no se hayan vendido imágenes interesantes. La mayoría de cambios de imágenes titulares ha sido para beneficio de la hermandad". Sí lamenta el profesor la pérdida de algunas imágenes secundarias "extraordinarias", como el misterio de las Cigarreras que se encuentra en Sanlúcar de Barrameda.

Hace unas semanas se pudo admirar en la exposición que celebró la Hermandad de las Cigarreras en el Círculo Mercantil una excepcional talla de Cristo atado a la Columna que fue cedido a la hermandad en 1892 por el arzobispo Sanz y Forés. Fue titular hasta 1916, cuando se le encarga a Joaquín Bilbao el Cristo del Dolor. Esta bellísima imagen está atribuida a Pedro Roldán, aunque el profesor Roda Peña, en una reciente investigación, la ha encuadrado en la producción de Benito de Hita y Castillo. En 1916, el cardenal Almaraz ordenó su traslado la parroquia de Santiago el Mayor de Hinojos. Pertenece actualmente a la Hermandad Sacramental que lo saca en procesión el Miércoles Santo. En Sanlúcar de Barrameda se encuentran dos de los sayones que pertenecieron a las Cigarreras durante más de 250 años. Son del primer tercio del XVIII y resultan muy llamativos por sus ropajes "a la turca". La tercera imagen de este conjunto sigue perteneciendo a la hermandad de Los Remedios que lo tiene cedido a la cofradía sanluqueña.

La Hermandad de la Vera Cruz de Mairena del Alcor adquirió en 1937 un crucificado que perteneció a la Lanzada, saliendo en procesión hasta 1928, y que también salió dos años, 1935 y 1936, con la Hiniesta. Del original sólo queda la cabeza, atribuida a Cristóbal Ramos. El cuerpo, que era de pasta, fue sustituido en 1992 por uno de talla que hizo Álvarez Duarte respetando su traza.

La Hermandad de San Roque tras perder sus imágenes en el incendio de la parroquia en 1936, encargó a Manuel Vergara dos nuevas tallas titulares. La Virgen fue estrenada en 1937 y el Señor un año después. Apenas salieron un año puesto que fueron sustituidas por las actuales. La Virgen, con la advocación de la Soledad, se encuentra en Aracena; y el Nazareno, en Santaella (Córdoba).

La primitiva imagen del Señor del Soberano Poder ante Caifás, obra de Pires Azcárraga, recibe culto desde 1979 en Jerez de los Caballeros (Badajoz) como Jesús del Gran Amor. En Almagro (Ciudad Real) se conserva una antigua imagen de pasta de madera del XVI, que fue Crucificado de las Aguas entre 1751 y 1778, como narra Enrique Guevara en su libro Los tesoros perdidos de la Semana Santa de Sevilla. La imagen partió en 1942 de la sacristía de San Jacinto al convento de la Asunción de Almagro (dominicos).

La Hermandad del Baratillo contó durante las primeras décadas del siglo XX con un paso de misterio cuyas imágenes fueron sustituidas por las actuales. Todas las imágenes eran de Emilio Pizarro de la Cruz. El Cristo pertenece a la Hermandad del Santo Entierro de El Rubio. La Virgen, con la advocación de Angustias, pertenece a la Hermandad de la Vera Cruz de Villalba del Alcor. La Magdalena fue transformada en la Dolorosa del misterio cuando la Virgen de la Piedad pasó al paso de palio. Hoy, procesiona como Virgen de los Ángeles en Isla Cristina. Las imágenes de San Juan, José de Arimatea y Nicodemo forman parte del misterio del Santo Entierro de esta misma localidad onubense.

En 1930 Antonio Bidón realizó gratuitamente para la Hermandad de los Estudiantes una Dolorosa que fue bendecida por el Cardenal Ilundain en 1931. Esta talla no fue del agrado de los hermanos, por lo que al poco tiempo se acordó su sustitución en 1942 por la imagen actual de Juan de Astorga, procedente de la extinta cofradía del Despedimento. La antigua imagen realizada por Bidón se encuentra actualmente expuesta al culto en la localidad burgalesa de Bezana, si bien, diversas intervenciones la han sometido a una fisonomía bastante alejada de la realizada por Bidón.

En 1922 salía por primera vez la Hermandad de San Benito tras su reorganización. En el primero de sus dos pasos sacó una imagen de Jesús en el momento de su presentación al pueblo tallada por Esteban Domínguez y que hoy se venera como Cautivo en Villanueva del Río. La hermandad no volvió a salir hasta 1928, cuando ya lo hizo con el Señor y el misterio de Castillo Lastrucci.

Antes de estrenar la actual Dolorosa de Eslava, la Hermandad de Santa Cruz procesionó durante los años 1965 y 1966 en su recién estrenado paso de palio con la Virgen que había salido hasta entonces a los pies del Cristo, atribuida a Blas Molner, y que había sido transformada por Abascal. El resultado de la transformación no convenció a los hermanos, optando la hermandad por buscar una nueva imagen. La antigua Virgen se venera hoy con la advocación del Rosario en sus misterios dolorosos en Bonares (Huelva).

Recientemente se ha vinculado la antigua Dolorosa titular de la Quinta Angustia, que fue escondida en la cripta de la Magdalena en el año 1932, como relata Juan Pedro Recio en su libro Las cofradías de Sevilla en la II República, quedando afectada por la humedad siendo imposible su restauración. Al menos esa es la versión oficial, pero nuevas investigaciones sitúan a esta imagen en Linares, donde procesiona con la advocación de Salud en su Soledad. Habría llegado allí a través de un anticuario. Andrés Luque señala que es difícil saber si esta Dolorosa fue la primitiva del misterio de la Quinta Angustia y si su hechura se debe a Pedro Roldán.

Entre las imágenes secundarias perdidas se encuentran las del antiguo paso de misterio de la Sentencia de la Hermandad de la Macarena, que era conocido popularmente por la Barbería, debido a la situación de las imágenes. Imágenes muy retocadas por Emilio Pizarro en 1898, el misterio fue sustituido en 1929 por el actual, siendo vendido a la jerezana Hermandad de la Yedra, que aunque ya no lo saca en procesión, lo conserva en parte.