Objetivo: evitar las ratoneras

Más de cuarenta folios trufados de mapas y tablas de porcentajes. Hasta 720 combinaciones de paso por la carrera oficial desde el punto de vista matemático para que la noche más hermosa de la ciudad no se convierta definitivamente en la más encanallada. La empresa Seprur, Servicios Integrados, S. L., ha elaborado por encargo del Consejo un diagnóstico de la situación en la que define claramente dos "ratoneras" que, además de otros puntos calientes, ponen en jaque la seguridad de la Madrugada: el cruce del Gran Poder con la Esperanza de Triana y el de la Macarena con el Silencio.

El Silencio. Hay que evitar que en su regreso se aproxime demasiado a la Macarena. Se plantea la necesidad de que, en el cruce entre Javier Lasso de la Vega y Amor de Dios, la primitiva cofradía retorne por Amor de Dios, San Miguel y Trajano para continuar con su itinerario habitual. Este rodeo de unos 180 metros aleja a la cofradía de la Campana. Se ganan 15 minutos de margen para evitar el encuentro entre ambos cortejos.

El Gran Poder. Urge retrasar su paso por el punto de cruce con la Esperanza de Triana. Para ello se plantea que, en lugar de ir por Fray Ceferino, lo haga por Santo Tomás, Santander y Tomás de Ibarra para alcanzar el Arco del Postigo, lo que incrementa el recorrido de 10 a 15 minutos, retrasando en ese tiempo su llegada al punto de cruce con la Esperanza de Triana. Los expertos refieren que esta modificación provoca que el Gran Poder regrese más tarde a su templo, "si bien la realidad es que no puede llegar mucho antes debido al parón actual en la calle Zaragoza".

La Esperanza de Triana. Es conocido que, cada año, el Gran Poder se encuentra a su regreso con la Esperanza de Triana en el cruce entre Zaragoza y San Pablo. Esto se "agrava" porque la Esperanza de Triana no puede avanzar hasta que no finaliza su salida el Calvario. Un cambio del recorrido de la cofradía trianera desviándose por Marqués de Paradas, Canalejas y Bailén para llegar a Murillo implica un aumento de casi 160 metros respecto a 2015, pero sólo de unos 90 metros si se considera el itinerario de 2014 (Rioja-Velázquez). Esto tendría "dos efectos positivos" que paliarían la situación actual: alejaría el cruce del Gran Poder con la Esperanza de Triana unos 140 metros y permitiría a cofradía de Triana, con este nuevo recorrido, avanzar hasta la esquina de O´Donnell con Velázquez.

Los Gitanos. Si bien el paso de esta hermandad en su ida a la carrera oficial no colisiona con otros cortejos, deben tenerse en cuenta dos aspectos. El primero es la cercanía de su paso de Virgen con la cruz de guía de la Macarena a su vuelta por Cuna, lo que conlleva una aglomeración de personas en una calle estrecha que provoca una acumulación de público "indeseado". El segundo es que su tránsito por las setas en las "peores horas" de la Madrugada ha provocado que esta hermandad "se vea asociada con conflictos de orden público, situación que se debería evitar a toda costa, ya que sólo dañan la imagen de la Semana Santa". Para ello se propone modificar sustancialmente el recorrido de ida, con una ampliación de sólo seis metros. El recorrido propuesto modifica el actual desde la calle Dueñas hasta Trajano y sería el siguiente: Dueñas, San Juan de la Palma, Feria, Castellar, Saavedras, San Martín, Cervantes, San Andrés, García Tassara, Amor de Dios, San Miguel y Trajano. Así se evita el paso por las setas y se incrementa en 190 metros la distancia mínima entre esta hermandad y la Macarena a su regreso. Esta propuesta es "necesaria" para evitar "posibles altercados que empañan la imagen de la Semana Santa y de la Madrugada en particular". La consecuencia es que los Gitanos deja de pasar a la ida por el monasterio de Santa Ángela, por lo que "se ha considerado un itinerario de vuelta alternativo al actual que permita a la hermandad procesionar hasta el convento". Este recorrido adicional de 460 metros provoca que entre en su templo unos 40 minutos más tarde, "pero no tienen incidencia en los aspectos que se quieren resolver en este trabajo de investigación".

Incidencia. Los cambios descritos suponen una modificación de la longitud de los recorridos de un 4% o inferior para el Gran Poder, la Esperanza de Triana y el Silencio; y de un 10% para los Gitanos. El Gran Poder llegaría al nuevo punto de cruce con la Esperanza de Triana (Gravina con Canalejas) mucho antes de que la cofradía trianera inicie su recorrido por la carrera oficial. Si este cortejo quisiera dejar paso al Gran Poder, debería comprimirse hasta unos 530 metros, la mitad de su tamaño estimado al paso por la carrera oficial. Además, cualquier incremento sustancial en la participación del número de nazarenos en la Macarena, el Calvario o la Esperanza de Triana que implicara un aumento en el tiempo de paso agravaría esta situación.

Orden de paso. Las soluciones adecuadas pasan por retrasar el Gran Poder en su orden de paso por la carrera oficial, dar más espacio a la Esperanza de Triana para que ajuste su tamaño o adelantar el paso de esta cofradía. Un análisis matemático de las opciones de orden concluye que hay 720 posibilidades, pero los expertos admiten que no quieren "inventar" otra Madrugada, sino "adaptar" la que ya se conoce. El cambio debe ser "suficiente" y lo más "limitado" posible para que no tenga el efecto de una ruptura. "Como ejemplo, cualquier propuesta que dejara en los últimos lugares a las dos hermandades que se cruzan con el resto (el Silencio y el Gran Poder), técnicamente sería viable (hay casi 50 opciones) pero no sería asumible, pues implica tal cambio que el resultado no sería reconocible". Se han considerado cuatro opciones, de las que tres implican mover al Calvario de su actual posición (cuarto lugar) al segundo, tercer o quinto lugar. La otra opción es intercambiar el Gran Poder y la Macarena.

Descartes. El intercambio entre el Gran Poder y la Macarena "no es viable", ya que obligaría a la cofradía de capa a salir antes de las 23:00. Existe un compromiso de las hermandades de la Madrugada para no iniciar la estación antes de las doce. Tampoco es viable un retraso de todas las hermandades, ya que implicaría finalizar el paso por la carrera oficial después de las 09:30. ¿Y el Calvario en tercera posición? En tal caso, la Macarena sería la cuarta, un cambio que sólo dejaría unos 75 metros más a disposición de la Esperanza de Triana, una cantidad insuficiente "a todas luces" para mantener la "dignidad" del cortejo si debe comprimirse hasta los 600 metros. ¿Y el Calvario en quinta posición? El intercambio lo haría con la Esperanza de Triana y, a priori, resolvería el problema, pero de forma muy "ajustada" y, además, generando otros inconvenientes, entre ellos que, "dado el tejido social que configura el Calvario, sería un golpe importante retrasar su salida".

La solución. Los expertos determinan que, como avanzó este periódico ayer, lo más idóneo es que el Calvario pase por la carrera oficial en segundo lugar. La cofradía de la Magdalena adelantaría su salida en más de dos horas y media. La Esperanza de Triana adelantaría su salida cinco minutos (01:55), el Silencio mantiene su horario (01:05), los Gitanos sale diez minutos más tarde (2:40), el Gran Poder retrasa su salida 25 minutos (01:25) e igualmente la Macarena (00:25). Respecto a los horarios de regreso al templo, el Calvario lo adelanta en casi tres horas (05:05) y el Silencio lo mantiene (05:50). Los restantes cortejos lo retrasan: el Gran Poder en 40 minutos (08:35), la Macarena en 30 minutos (13:35), la Esperanza de Triana en diez (13:40) y los Gitanos en una hora (14:00).

Otras reflexiones. Los expertos contratados por el Consejo hacen varias consideraciones finales: "No se debe olvidar que la expansión, en los últimos años, de la Semana Santa en general y de las hermandades de la Madrugada en particular ha generado unos puntos conflictivos que se convierten en ratoneras en caso de retrasos, lo que no debe ser admisible por el peligro que suponen las aglomeraciones y la penosidad añadida a nazarenos y penitentes". Defienden que la solución propuesta "resuelve más que razonablemente el nudo gordiano de la Madrugada", definido en el cruce de la Esperanza de Triana y el Gran Poder, y en el cruce del Silencio con la Macarena en Trajano. Para afinar aún más la puesta en práctica de estas soluciones se hacen recomendaciones adicionales.

Sugerencias. En el cruce del Silencio con la Macarena, se sugiere atemperar el ritmo del Silencio en su regreso para que retrase entre cinco y diez minutos su llegada a Trajano, nuevo punto de cruce con la Macarena. Y se recomienda a la Macarena: "El hecho de que su entrada en la Campana esté próxima, requerirá que se haya acercado el paso de palio para darle tiempo para su lucimiento lo de que, de forma natural, hará que el final del cortejo avive un poco el paso y deje algunos minutos de margen". En el cruce del Gran Poder y la Esperanza de Triana, se ve conveniente que el Gran Poder reduzca la velocidad un 4%, de manera que llegue al punto de cruce cinco minutos más tarde, lo que sería "fácilmente recuperable" con un aumento similar de la velocidad (un 5%) una vez pasado el cruce. La Esperanza de Triana podría hacer un "esfuerzo similar" y aligerar el paso para pasar por el punto de cruce cinco minutos antes, lo que implica recortar unos 40-50 metros su tamaño (menos del 5%), tiempo que puede recuperar el paso de palio desde el cruce hasta la Campana con un pequeño aumento de velocidad. Esta acción combinada dejaría unos 15 minutos de margen que servirían para descongestionar la zona y como previsión de posibles retrasos.

El Ayuntamiento esperará a la propuesta oficial

El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, esperará a que haya una propuesta oficial del Consejo para cambiar la Madrugada. El Ayuntamiento no valorará los avances, ni las reuniones que se puedan ir manteniendo, como explicó ayer el primer edil: "El Consejo sabe que se aplazó cualquier análisis a que definitivamente se ponga sobre la mesa una propuesta, algo que no se ha producido. Todos los trabajos previos que se estén desarrollando con criterios técnicos, de seguridad, organizativos, corresponden al Consejo. De momento, ni el alcalde ni el Ayuntamiento conocen cuál es el planteamiento porque no hay una propuesta cerrada. Hay que dejar trabajar al Consejo".