El Museo llevará a cabildo la recuperación de las manos juntas de la Virgen de las Aguas

La Hermandad del Museo someterá a cabildo de hermanos la recuperación de las antiguas manos de la Virgen de las Aguas. Esta propuesta se formalizará después de que un grupo de miembros de la corporación haya recogido más de un centenar de firmas a favor de que la dolorosa del Lunes Santo vuelve a contemplarse como en la procesión extraordinaria celebrada en octubre de 2022, con motivo de los dos siglos y medio de su hechura por Cristóbal Ramos.

Fue, sin duda, una de las imágenes cofradieras de 2022: la Virgen de las Aguas con sus manos entrelazadas. El aniversario justificó esta recuperación que recibió la aceptación de la inmensa mayoría de los devotos, que coincidían en señalar que tal disposición acentúa la expresividad de la titular del Museo.

En principio, tal reposición se ciñó a la procesión extraordinaria, pero aquella estampa abrió el debate sobre la conveniencia de que perdurara en el tiempo. Por tal motivo, un amplio grupo de hermanos del Museo se movilizaron y en las últimas semanas han recogido más de un centenar de firmas de apoyo para que las manos entrelazadas acompañen en más ocasiones a la Virgen de las Aguas.

A mediados de marzo

La junta de gobierno de la corporación, que preside Juan Toro, se ha mostrado "sensible" al clamor de este importante sector de hermanos, motivo por el cual incluirá la propuesta en el orden del día del próximo cabildo. Dicha cita tendrá lugar a mediados de marzo. Aún no está decidido si será dentro de una convocatoria ordinaria o extraordinaria. Tampoco si esa recuperación será para siempre o sólo para determinados momentos, como la estación de penitencia. "Todas estas cuestiones se tratarán en el cabildo", apunta Toro.

El propio hermano mayor reconoce que le gustó "bastante" la Virgen de las Aguas con sus manos originales en aquella procesión, en la que, a diferencia de la estación de penitencia del Lunes Santo, lucía mantilla en vez del tul en el tocado tan personal con el que está vestida siempre. Esta imagen fue concebida por Cristóbal Ramos en posición arrodillada, formando un Stabat Mater bajo el Cristo de la Expiración.

Las manos de Infantes Reina

El conjunto dejó de contemplarse en su concepción original cuando el icono mariano empezó a salir en su paso propio. Por tal motivo, y adaptándose al modelo imperante de dolorosa bajo palio, se mostró con las manos abiertas y separadas, talladas por Antonio Infantes Reina. Francisco Berlanga restauró el juego primitivo en el año 2000.

En el cabildo celebrado el verano pasado que aprobó la salida extraordinaria, los asistentes respaldaron -160 votos a favor y 39 en contra- la recuperación de las manos entrelazadas para dicha ocasión. Ahora se someterá en un próximo cabildo su recuperación, al menos, para Semana Santa.