La Bofetá desmenuza su historia, patrimonio y cofradía en una publicación con 1.300 páginas

Tres lujosos tomos, 1.273 páginas, 1300 fotografías, siete autores y numerosas revelaciones y hechos históricos desenmarañados. Así es la publicación Dulce Nombre: Hermandad, patrimonio y cofradía, que fue presentada en la noche del lunes en el Colegio de Graduados Sociales de Sevilla, cuya patrona es la Virgen del Dulce Nombre. La Hermandad de la Bofetá lleva cuatro años trabajando en esta gran obra, coordinada por Juan Pedro Recio, archivero e historiador de la corporación, que repasa su devenir histórico desde su primera época, en el siglo XVI, hasta la actualidad, pasando por su reorganización en 1919.

La ambiciosa publicación de la Hermandad de la Bofetá se articula en tres tomos, cuya maquetación y diseño ha corrido a cargo de Páginas del Sur (Grupo Joly). El primero de ellos versa cobre la historia. Desde la hermandad antigua, fundada en torno a 1585, a la época actual. Gracias a la labor llevada a cabo por Juan Pedro Recio, Jesús Rodríguez Gálvez y Jesús Rey, que han investigado en archivos como el Provincial, el del Arzobispado y otros muchos privados, se han podido rescatar documentos del siglo XVII en los que se habla de los orígenes de la corporación, o cómo se produce el traslado, en 1666, de la Hermandad del Mayor Dolor de Cristo y Dulce Nombre de María desde el convento Casa Grande la Merced a la capilla del asilo de las Niñas Huérfanas, donde acaba rindiendo culto a la Virgen de los Desamparados, patrona de esta institución benéfica, incluso por encima de su propia estación de penitencia, que realizaba el Jueves Santo.

"Gracias a los documentos hemos sabido cómo era la vida de la hermandad en el asilo de las niñas huérfanas y cómo se hace cargo de la capilla y el hospicio en un momento determinado", explica Recio. Esta labor de investigación ha posibilitado que la hermandad se haga con una copia del expediente de reorganización. "No sabíamos cómo fue aquello. El provisor del Arzobispado habla en el documento de que es loable cómo quieren volver a reorganizar la hermandad. Sabemos por libros y documentos, uno de ellos de 1587, que la corporación se funda en torno a 1584-85".

El primero de los tomos se completa con una descripción de las sedes canónicas que ha tenido la hermandad, los nombres ilustres (administradores del asilo, superioras del beaterio, hermanos mayores, directores espirituales y todas las juntas de gobierno desde 1919 a 2020.

El segundo tomo está dedicado al patrimonio y cuenta con 13 capítulos que abarcan desde el Cristo del Mayor Dolor, la imaginería antigua, las nuevas de Castillo Lastrucci, otras esculturas de la hermandad, los bordados, el paso de misterio, el paso de palio, la pintura, la música, la literatura, o la cerámica.

Una de las grandes revelaciones del libro es que parece ser que la advocación de Mayor Dolor era la que tenía la imagen del misterio de la Bofetada, no el Crucificado, que como era habitual en otras cofradías con pasos de misterio sería simplemente el Santo Cristo.

El último de los tomos desmenuza la cofradía. Desde su primera época, hasta 1745; y los últimos cien Martes Santos, desde 1920 a 1919. Ahí se detallan los recorridos y horarios, cómo era el cortejo y otros detalles interesantes. Además, se cuenta cómo fe la creación del Martes Santo y qué cofradías han salido alguna vez este día por distintos motivos a lo largo de la historia. El tomo se completa con una relación de todos los cultos y sus predicadores desde 1919 al 31 de diciembre de 2019.

Los libros cuentan con más de 1.300 fotografías, elegidas de unas 7.000; más de 2.600 notas al pie, que demuestra el trabajo serio y riguroso realizado; y se han consultado más de 180 obras, publicaciones específicas y archivos.

Bajo la coordinación de Juan Pedro Recio han colaborado en la publicación los historiadores Andrés Luque Teruel, Alicia Iglesias Cumplido y Rafael J. Ríos Delgado; así como los hermanos Jesús Rey Jiménez, Jesús Enrique Rodríguez Gálvez, José Luis Trujillo del Real y José Luis González Rapela.

A la presentación, en el colegio de Graduados Sociales, asistieron, entre otras autoridades, el delegado de Gobernación y Fiestas Mayores, Juan Carlos Cabrera; y el presidente del Consejo de Cofradías, Francisco Vélez.