Basílica de la Macarena, hogar de la Esperanza de Sevilla

La Basílica de la Macarena (Plaza de la Esperanza Macarena, 1 y 2), tras ser bendecida por el Cardenal Segura el 18 de marzo del año 1949, se convirtió en el templo destinado a albergar a los titulares de la Hermandad de la Macarena. Hasta entonces se encontraban en la Iglesia de San Gil, incendiada en 1936. Se trata de la primera y única basílica consagrada a una dolorosa en Sevilla.

El templo consta de planta basilical de una sola nave cubierta con una bóveda de cañón con lunetos y cuatro capillas laterales. En su entrada tiene un pórtico que combina arco y dintel sobre columnas marmóreas y una escultura que representa la virtud teologal de la Esperanza. Una espadaña, ampliada a lo largo de los años, corona esta fachada principal.

El interior de esta basílica se caracteriza por su decoración con mármoles de varios colores y pinturas al fresco dedicadas a la Virgen. El templo está repleto de retablos en madera dorada, obras del taller de Juan Pérez Calvo. En el mayor de ellos se ubica a la Virgen de la Esperanza Macarena, situada en un camarín decorado con orfebrería de Fernando Marmolejo. En las cuatro capillas laterales se encuentran Jesús de la Sentencia, la Virgen del Santo Rosario, el Cristo de la Salvación y las Patronas de Hispanoamérica.

Hermandades que procesionan desde la Basílica de la Macarena

La Hermandad de la Macarena tiene en esta Basílica su sede canónica. Esta corporación procesiona durante la Madrugada. A las doce en punto del Viernes Santo de cada Semana Santa miles de nazarenos acompañan a Jesús de la Sentencia y a la Virgen de la Esperanza Macarena desde este templo. Por otro lado, la Virgen del Rosario sale en procesión el tercer domingo de cada octubre.

La Esperanza Macarena, talla anónima del siglo XVII, fue coronada canónicamente en 1964, convirtiéndose así en la segunda dolorosa de la ciudad en recibir ese honor. Jesús de la Sentencia, tallado en madera en los años 30, es obra del escultor Felipe Morales.

Por otro lado, resalta está el museo-tesoro de la Hermandad de la Macarena, uno de los más ricos de la ciudad. Tiene cinco salas repartidas en tres plantas y ofrece un recorrido por la historia de la corporación y de la Semana Santa sevillana. Pasos, mantos, túnicas, sayas o coronas permiten al visitante acercarse a la cofradía macarena, que acompaña la visita con marchas procesionales.