Madrugada 2018: Bares cerrados y detectores de metales

Sevilla/La Madrugada de 2018 será muy distinta a la pasada en los planes municipales. El Ayuntamiento de Sevilla ya tiene esbozadas las líneas generales del dispositivo que se considera imprescindible para garantizar una noche sin incidencias el próximo año. El gobierno baraja emitir un decreto para ordenar el cierre de los bares y tiendas de conveniencia de determinadas zonas del centro entre las 23:00 del Jueves Santo y las 6:00 del Viernes Santo. Las calles del centro y algunas de barrios como Triana serán agrupadas en tres niveles según el riesgo de altercados en función de la experiencia acumulada. El decreto de cierre de establecimientos que suministran alcohol distinguirá entre negocios del nivel 1, 2 ó 3. Por lógica, la carrera oficial tendrá asignado el primer nivel, una calificación máxima que se otorgará también, por ejemplo, a la calle Arfe, donde se considera que ha estado la zona cero de los conflictos de la pasada Madrugada. El ejecutivo que preside el socialista Juan Espadas está dispuesto a tomar esta medida, pese al rechazo inicial que pueda generar entre los hosteleros. La cifra de establecimientos precintados la pasada Semana Semana por ilegalidades cometidas se considera suficientemente elevada como para que la hostelería sea clave en el programa de medidas que necesariamente se tienen que tomar para el año próximo. Como ejemplo se refiere el bar que se tuvo que cerrar en Argote de Molina, que distribuía alcohol directamente a la vía pública durante el paso de cofradías; los seis negocios precintados en la zona de la Alfalfa y las tres tiendas de chinos. El decreto podrá modular los horarios de cierre en función de los niveles, aunque la franja horaria que se pretende cuidar al máximo es la referida de 11:00 a 6:00. Se parte de la base de que el riesgo, en general, se acumula entre las 3:00 y las 5:00.

La otra gran novedad consistirá en acotar las consideradas zonas de especial sensibilidad, donde ya se ha trabajado hasta ahora con medidas solamente de aforamiento. Acotar en lugar de aforar permitirá al Ayuntamiento establecer criterios restrictivos de admisión del público. Estará garantizado en todo momento el acceso de residentes, trabajadores y abonados de la carrera oficial debidamente acreditados. Para el acceso de público en general se tendrán en cuenta los criterios de aforamiento habituales (que el número de personas ronde el 60% de la capacidad total para permitir márgenes de seguridad) y los más elementales de seguridad, por lo que se impedirá el ingreso con sillas, el uso de prendas con capuchas (empleadas para burlar las cámaras de seguridad) o cualquier motivo que genere sospechas o supongan obstáculos al tráfico peatonal. En los puntos de acceso se emplearán detectores de metales como los que se usan en los estadios, estaciones de tren o aeropuertos.

El ejemplo más reciente de zona acotada con éxito coincide precisamente con un tramo de la carrera oficial. El Ayuntamiento acotó con éxito la Plaza de la Virgen de los Reyes y sus alrededores -como se aprecia en el gráfico que complementa esta información- con motivo de la semana en que se rodaron escenas de la película Noche y día, protagonizada por Tom Cruise y Cameron Díaz.

Entre las zonas de especial protección que serán acotadas se encuentran las siguientes: Arfe-Postigo-Adriano, Alfalfa-Pescadería-Argote de Molina, Betis-Altozano, Plaza del Duque, Plaza de la Encarnación, Orfila-Javier Lasso de la Vega, Cuna, Reyes Católicos-Puente de Triana y San Pablo-Magdalena. El Ayuntamiento tiene que tener elaborado antes del verano el coste que supone acotar todas estas zonas, pues se requiere de decenas de vigilantes privados.

La otra medida que ya ha trascendido es la multiplicación de las cámaras de seguridad. Las grabaciones de la que ya funcionan desde hace varios años han permitido apreciar el efecto dominó como causante de que un conflicto en el sector de Arfe tenga su repercusión minutos después en la Plaza del Salvador. Otra de las medidas que ya se contempla es la instalación de megafonía "trenzada" a lo largo de la carrera oficial que permita ofrecer una información precisa de forma rápida, lo cual supone también un coste a tener en cuenta en el presupuesto del plan especial que ha de estar calculado antes del verano. El Ayuntamiento no descarta pedir la participación del Consejo de Cofradías y de empresas privadas para sufragar todas estas medidas. Se parte de la base de que está en juego el prestigio de la ciudad en uno de sus períodos de mayor atracción de turismo, como demuestran las estadísticas. Baste un ejemplo: las mañanas de Semana Santa y Feria son las que más visitas registra la Catedral, principal monumento de la ciudad. Cuidar la Madrugada, apostar por su seguridad con medidas innovadoras, es invertir en la marca de la ciudad.

El esfuerzo del Ayuntamiento en materia de seguridad en Semana Santa se ha disparado en los últimos años. El plan especial comprende ya diez días al incluir las vísperas y el Domingo de Resurrección. El Ayuntamiento no contempla de momento en el boceto del dispositivo la necesidad de reducir el número de sillas de la carrera oficial. De manera informal se admite que se podrían valorar otras medidas, como retrasar dos horas el inicio de la Madrugada, con el objetivo de reducir las horas de exposición al riesgo de las cofradías, o sugerir una limitación del número de nazarenos, pero se considera que estas iniciativas habrían de partir del propio Consejo de Hermandades que, hasta ahora, sí ha hecho referencia a la implantación de una suerte de ley seca, lo que de alguna manera se impondría con el decreto de cierre de bares durante un máximo de siete horas.