Aguirre, esperanzado de cara a la Semana Santa, bromea con dar la primera chicotá en la Borriquita
El consejero de Salud de la Junta de Andalucía confía en que la sexta ola esté estabilizada en febrero
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Esperanzado en vivir una Semana Santa normal. Así se ha mostrado este martes Jesús Aguirre, consejero de Salud y Familia de la Junta de Andalucía, de cara a la celebración de la próxima primavera. La máxima autoridad sanitaria de la región ha vuelto a romper una lanza en favor de la celebración de las procesiones de Semana Santa tras dos años sin ellas y ha asegurado que en febrero la sexta ola estará ya en una fase de estabilización.
Aguirre ha bromeado incluso con realizar la primera chicotá al paso de la Borriquita, tras ser preguntado por la situación durante una rueda de prensa. "Yo espero en la salida de la Borriquita la primera chicotá darla yo. Tengo que tener la esperanza de tener una Semana Santa normal por la evolución de la ola. Posiblemente para febrero, ya bien metidos, esté en una fase de estabilización. Puede ser que esta cepa al ser tan virulenta ocupe ya un espacio en el ecosistema vírico para quedarse. No sabemos qué evolución va a tener", ha declarado.
En Sevilla, tanto el Consejo de Cofradías como el Ayuntamiento, trabajan con el único escenario de la celebración de las Fiestas de Primera. Los preparativos para la Semana Santa y la Feria de Abril están en marcha desde hace semanas, como viene informando este periódico.
En el caso de la Semana Santa, los abonados de la carrera oficial ya han recibido sus cartas para la renovación de las localidades. El Ayuntamiento tiene en marcha todos los contratos y hay hermandades que ya han puesto en marcha sus repartos de papeletas de sitio.
La evolución de la sexta ola, como ha asegurado el consejero, hace prever que para el próximo mes la incidencia esté ya bajo control, aunque la Junta ha advertido que antes de marzo es probable que se haya contagiado más del 60% de la población. Con meses todavía por el delante para la Semana Santa -el Domingo de Ramos es el 10 de abril, una de las fechas más tardías posibles- se contemplan en cualquier caso recomendaciones, como que los cortejos vayan por calles más anchas, algo complicado en Sevilla, como ha puntualizado el alcalde, Antonio Muñoz. La Junta también trabaja en un protocolo para los costaleros.
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