Estos son los alimentos que nos ayudan a activar la circulación sanguínea en verano

El calor puede causar la dilatación de los vasos sanguíneos, lo que puede hacer que la sangre fluya más lentamente. Esto puede llevar a hinchazón, especialmente en las extremidades, y a una sensación de pesadez o cansancio en las piernas.

Una mala circulación puede aumentar el riesgo de problemas como la trombosis venosa profunda o las varices, por lo que mantener una buena circulación de la sangre va a ayudar a prevenir estos problemas gracias a la eliminación de toxinas y otros elementos que el cuerpo no necesita.

También contribuye a mejorar la recuperación muscular después del ejercicio, por lo que nuestro estado de salud va a ser mucho mejor en líneas generales.

"Los paraguayos son aliados contra el estrés oxidativo y la inflamación"

¿Qué necesitamos tener o hacer para mejorar la circulación sanguínea? Estar bien hidratado. Es fundamental que a nuestro organismo no le falten los líquidos y podemos facilitarlo a través de la ingesta de diferentes bebidas como mediante una buena alimentación.

Alimentos del verano para mejorar la circulación

Uno de los alimentos estrella del verano es el melón que contiene adenosina, un anticoagulante natural que previene los trombos ya que actúa como un vasodilatador, mejorando el flujo sanguíneo y reduciendo la resistencia periférica. Esto contribuye a reducir la presión arterial y a mejorar la oxigenación de los tejidos.

El pimiento también es un alimento que nos ayuda a evitar la formación de coágulos gracias a su combinación de vitamina C y B6 que contienen los betacarotenos, por lo que disfrutaremos de un sistema inmunitario y nervioso mucho más fuerte.

Para esto también son buenos los paraguayos los cuales son aliados contra el estrés oxidativo y la inflamación, por lo que el cuidado de las arterias está garantizado. Como plato principal, puedes optar por el pescado azul rico en ácidos grasos omega 3, como guarnición o como parte de un plato, las verduras de hoja verde ricas en magnesio con el que mejoras el flujo sanguíneo, además de sus grandes dosis de antioxidantes, fibra y minerales.

Una circulación adecuada contribuye a un mayor bienestar y niveles de energía, lo que es especialmente importante durante los meses de verano cuando las actividades sociales y recreativas aumentan.

Qué nutrientes no deben faltar en nuestra alimentación

Los polifenoles son compuestos químicos que se encuentran en las plantas y que tienen propiedades antioxidantes, por lo que ayudan a las células a proteger al cuerpo del daño que causan los radicales libres. Se encuentran en alimentos como el té, las frutas, las verduras y algunos granos.

Los betacarotenos, al ser precursores de la vitamina A, juegan un papel indirecto en la salud cardiovascular y, a su vez, es esencial para el mantenimiento de las células epiteliales y la integridad de las paredes de los vasos sanguíneos, así que van a estar mucho más sanos y flexibles, reduciendo el riesgo de aterosclerosis (endurecimiento de las arterias).

La vitamina C es conocida por sus propiedades antioxidantes, que protegen las células del daño causado por los radicales libres, por lo que previene, también, el daño en las paredes de los vasos sanguíneos y reduce su inflamación, lo que es crucial para una circulación saludable.

Además, la vitamina C mejora la producción de óxido nítrico, una molécula que ayuda a relajar y a dilatar los vasos sanguíneos, mejorando el flujo sanguíneo y reduciendo la presión arterial. También juega un papel en la síntesis de colágeno, que es importante para la integridad estructural de los vasos sanguíneos.

Factores que influyen en la inflamación

• Exceso de peso
• Periodos de desajustes hormonales, como el embarazo, la menstruación o la menopausia.
• Sedentarismo
• Alimentos ricos en grasas y sodio
• Consumo de ciertos medicamentos: píldora anticonceptiva, antidepresivos o antiinflamatorios, respectivamente
• Enfermedades como el tiroides, cardíacas, renales o hepáticas
• Altas temperaturas, ya que dilatan las venas y entorpecen el retorno de la sangre al corazón