Una nutricionista desvela los alimentos que debemos añadir a nuestra cena para tener un vientre plano a la mañana siguiente

Levantarse con la barriga hinchada es algo que le ocurre a muchas personas y que, en ocasiones, está provocado por lo que se ha cenado la noche anterior, pues en la mayoría de casos esta inflamación está relacionada con los gases que nos han provocado algún alimento, aunque el estreñimiento o un trastorno digestivo también pueden estar detrás de este problema, por lo que si se sufre con frecuencia lo conveniente sería acudir a un médico.

Como apuntan desde la revista Clara, alimentos como las legumbres, los lácteos, los cereales integrales o las crucíferas pueden provocarnos gases que hagan que nos levantemos con la barriga hinchada. El consumo de alcohol, cenar demasiado tarde o el estrés o la ansiedad podrían ser otras causas que estarían detrás de ese problema cuya intensidad de los síntomas, en ocasiones, va aumentando a lo largo del día.

Por lo tanto, indican que la cena debe ser ligera y saludable. Además, se aconseja evitar las salsas, los fritos o las grasas saturadas, pues podrían no sentarnos bien. La doctora María Isabel Beltrán Margarit, nutricionista y miembro de la SEEDO (Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad), expone en la revista Claraalgunos alimentos indicados para consumir en esa última comida del día, para que nos levantemos con la barriga plana.

Estos son los alimentos que nos pueden ayudar a levantarnos con el vientre deshinchado

Desde el citado medio apuntan que no hay un alimento mágico que nos haga levantarnos con el vientre plano, sino que hay también otros factores que entran en juego, como la cantidad, la hidratación o la digestión. Sin embargo, hay algunas opciones que aportarán su granito de arena para que al día siguiente no suframos esa incómoda hinchazón.

Por ejemplo, las verduras y los alimentos que contengan proteína nos ayudarán en este aspecto, pues son fáciles de digerir, además de ser saciantes y nutritivos. Por lo que añadir el pescado blanco, el pollo, el huevo, el yogur o el queso a nuestras cenas sería interesante en este aspecto.

La experta también menciona a los alimentos diuréticos, antioxidantes y que presenten una gran cantidad de fibra en su composición, como el pepino, las almendras, los frutos rojos, la manzana o la sandía. Ingerir tempeh o ciruelas umeboshi repercutirá positivamente en nuestra flora bacteriana y en el sistema digestivo, por lo que también podrían forma parte de nuestra cena, pues igualmente nos ayudarán a levantarnos con la tripa plana.

En la revista indican también que es importante tanto masticar bien los alimentos como cenar, por lo menos, dos horas antes de irnos a la cama. Además, para favorecer la digestión también podemos acudir a las infusiones. La de hinojo o la manzanilla serían buenas opciones.