36 minutos de vida menos por comer un perrito caliente
El debate sobre la comida saludable está a la orden del día, no solo por los perjuicios que una dieta basada en ultraprocesados y carnes puede llegar a provocar en el cuerpo humano, si no también por el impacto negativo que la industria cárnica tiene sobre el medioambiente.
Al hilo del debate, en estudio científico reciente ha determinado que comer un perrito caliente puede quitar hasta 36 minutos de vida saludable. El trabajo, elaborado por investigadores de la Universidad de Michigan, en Estados Unidos, ha realizado una clasificación en la que figuran 5.853 alimentos según las propiedades nutritivas y el impacto medioambiental que generan.
El deterioro del medioambiente fue una de las cuestiones centrales que motivaron la investigación de Katerina Stylianou, Victor Fulgoni y Olivier Jolliet. La búsqueda de una mejor alimentación, que además tenga en cuenta las consecuencias sobre el planeta, es un tema que, por desconocimiento, genera confusión. El resultado de este estudio ha concluido en una lista que combinan factores de salud y medioambiente.
Así, siguiendo los índices de la lista, un perrito caliente se encuentra entre los menos recomendados, debido tanto a su composición a base de carne procesada de ternera como por su impacto en el planeta. Por el contrario, un sándwich de mantequilla de maní y mermelada puede ganar hasta 33 minutos de vida saludable, según apunta la investigación.
¿Qué alimentos se recomiendan en este estudio?
Como se indica previamente, la motivación de los científicos fue colaborar aportando una estadística concreta que pudiera ayudar a la modificación de los hábitos alimenticios teniendo también presente una mejora medioambiental. Aunque ya existen algunos trabajos que abordan estas temáticas, suelen analizar el aspecto nutricional y el ambiental por separado, lo que puede llegar a confundir a los consumidores.
El estudio final se ha configurado a modo de semáforo, es decir, en rojo los alimentos más perjudiciales con la salud y el medioambiente, en verde aquellos que son buenos en todos los aspectos (principalmente frutas y verduras) y en amarillos las comidas que flaquean en alguno de los dos ámbitos.
Los resultados del estudio determinaron que sustituir el 10% de la ingesta de calorías provenientes de carnes procesadas puede aumentar hasta 48 minutos de vida saludable diaria, siempre que el reemplazo sea a base de frutas, verduras, nueces, legumbres y determinados mariscos.
Estos alimentos componen la parte más recomendable del semáforo, mientras que las carnes rojas integran la menos aconsejable. Claro que la estadística tiene en cuenta, además, el impacto ambiental de la producción vacuna y la emisión de gases de invernadero.
Alimentos verdes
Según el estudio, en este extremo se encuentran, por ejemplo, las sardinas con salsa a base de tomate, que indicaron 82 minutos ganados.
También se encuentran en este lado las frutas, nueces, legumbres, cereales integrales, verduras orgánicas, mantequilla de maní y mariscos de origen sostenible.
Alimentos amarillos
Las comidas de esta parte del listado mantienen un equilibrio entre factores de riesgo y componentes nutricionales, por lo que están en un empate en cuanto a minutos de vida saludables. Los autores del estudio recomiendan su uso para reemplazar a las carnes procesadas.
Marcadas en amarillas estarían las aves de corral, los lácteos y los cereales cocidos como el arroz, así como las verduras producidas en invernadero.
Alimentos rojos
En colorado están marcadas las carnes en conserva y las procesadas, entre ellas, por supuesto, los perritos calientes, salchichas y demás simultáneos.
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