Los enemigos del cabello durante el verano, cómo evitarlos y cuidar de la salud capilar

El verano, el sol, el mar y las vacaciones son componentes que a todos nos gustan (y que nos sientan bien). A las puertas de la época más esperada del año, nos ponemos 'a punto' para recibirlo. Sin embargo, esta estación también trae consigo algunos factores incómodos. Más allá de las altas temperaturas, nuestro cabello y nuestra piel pielse exponen a todo tipo de agresiones diarias: la sal, el cloro, el sol, la humedad...; Principalmente el verano es la época del año en el que más sufre el cabello, especialmente para los cabellos largos, aquello que llevan alguna tipo de colaboración y por supuesto para los cabellos delicados.

Por ello, cuidarlo durante estos meses resulta esencial para no debilitarlo y mantener su salud. ¿Cómo combatir estos enemigos? Te contamos algunos 'trucos'.

CÓMO CUIDAR Y PROTEGER EL CABELLO DURANTE EL VERANO

Mucha hidratación

El pelo contiene alrededor de un 15% de agua y durante los días de mucho calor, parte de ese agua se evapora generando una importante pérdida de hidratación. Si el cabello está hidratado puede afrontar con más fuerza las agresiones externas. Aquí puedes usar desde productos específicos como sérums, aceites y mascarillas hidratantes hasta tratamientos de hidratación y nutrición, que aportan al cabello la rehidratación lipídica que necesita para verse suave, brillante y con luz.

No exponerlo de manera excesiva al sol

Para evitar que el cabello pierda queratina y brillo por su excesiva exposición a los rayos ultravioletas, lo mejor es cubrirlo con algún complemento como un sombrero o una gorra. Poner barreras físicas o recogerlo durante algunas horas, ayudará a que los rayos penetren menos en el cuero cabelludo.

Protector solar para el cabello

Al igual que cuidamos la piel, no debemos olvidar nuestro cabello. Es hora de escoger un producto específico en forma de spray para protegerlo. Si todavía no cuentas con protección solar para el cabello, puedes apostar por coger la mascarilla de la ducha y aplicártela en la playa. Es importante tener en cuenta que si te sumerges con frecuencia en el agua debes seguir echándote el protector mientras tengas expuesto tu cabello al los factores externos que lo dañan y envejecen.

No usar herramientas de calor

Durante estos meses lo mejor es dejar respirar a tu cabello y no someterlo a presiones y daños añadidos. Un claro ejemplo de esto son las planchas, secadores, tenacillas...; debemos guardar nuestras herramientas de belleza y no dañar el cabello con su calor.

Limpiar la sal y el cloro

Otro buen hábito en verano es mojarse el pelo en la ducha antes de entrar en la piscina o en el mar. Como el pelo es poroso y absorbe agua, si ya está mojado antes de entrar en contacto con la sal o el cloro, su poder de penetración es menor. Asimismo, es bueno limpiar con agua dulce la salitre y el cloro cuando salgamos del agua para que no penetre en nuestro cabello resecándolo.

No a los recogidos con el pelo mojado

La tracción constante del cabello y los peinados tirantes, pueden romperlo y hacer que se debilite. Dejarlo al aire respirando y secándose, es otro buen hábito que debemos mantener estos meses.

Cepillar el pelo en seco

El cabello mojado es menos elástico así que es más favorable peinarlo una vez se seque para evitar que sufra más de lo debido y que se parta. Siempre desde las puntas y subiendo poco a poco.