Dime cuándo te duchas y te diré qué efectos tiene sobre tu cuerpo

Se acerca el otoño y la vuelta a la rutina, las prisas, el estrés. Cuesta tiempo sacar tiempo para detenerse a comer, llevar unas pautas continuas de ejercicio, repasar las lecciones del día o sentarnos a comentar la jugada maestra del profesor o jefe que nos ha dejado en fuera de juego. En ocasiones nos cuesta trabajo sacar tiempo hasta para ducharnos, a pesar de que hay quien defiende el discurso de que ésta es una acción que puede alternarse porque ducharse todos los días puede ser perjudicial para la salud. Una reflexión que ataca directamente las líneas ideológicas de los más puristas de la higiene pero que se sostiene paradójicamente en los daños que podría producir en la pie. Distinto es el debate en torno a los beneficios que genera el momento del día que elegimos para exponer al cuerpo a dicho ritual. Hay quienes tienen la costumbre de ducharse nada más levantarse y quienes prefieren hacerlo al finalizar el día como broche definitivo de la jornada. Razones no les faltan a ninguno de los dos grupos, eso sí bajo premisas bien diferentes. Dime cuándo te duchas y te diré que efectos tiene sobre tu cuerpo

Por qué es preferible ducharse por la mañana

Hay quienes le cuesta levantarse por las mañanas, tardan en despertarse o activarse o sudan mucho por las noches. Para este tipo de personas, que tambien suelen tener la piel grasa, o se ven obligados a afeitarse por las mañanas antes de afrontar su jornada laboral, los expertos recomiendan que se duchen por las mañanas. Los beneficios de ducharse por la mañana se centran primordialmente en la activación del sistema nervioso. Sentir el agua cayendo por el cuerpo, masajear el cabello y eliminar cualquier tipo de impureza llena de energía el cuerpo y el alma para afrontar con mayor entusiasmo y fiabilidad nuestras labores, especialmente en la oficina.

Por qué es preferible duchar por la noche

Si, por el contrario, estamos en la tesitura de que somos una persona con la piel seca y usamos maquillaje o cremas a diario, la ducha por la noche será nuestra opción obligada. Está especialmente recomendada esta opción para aquellas personas que acumulan mucho estrés o tienen un trabajo exigente en el aspecto físico. También para aquellos que padecen dolores musculares o dedican las tardes a hacer ejercicio ¿Por qué? Pues porque precisamente la ducha por la noche lo que consigue principalmente es relajar el cuerpo humano. Su gran beneficio es que reduce el estrés, suprimiendo los niveles de cortisol en el cuerpo (hormona que genera el estrés al organismo), algo clave cuando llegas a casa muy cansado y precisas relajarte o calmarte para tener un descanso adecuado.