Un estudio relaciona el consumo de este grupo de alimentos con síntomas depresivos

Como apuntan desde la Organización Mundial de la Salud (OMS), citando al Instituto de Sanimetría y Evaluación Sanitaria, se estima que el 5% de los adultos padece depresión, una enfermedad que incluye a la dificultad para concentrase, a un sentimiento de culpa o a pensamientos suicidas como algunos de sus síntomas, siendo los más representativos la falta de interés por actividades o tener un estado de ánimo bajo.

Las personas que padecen esta enfermedad, que "es el resultado de interacciones complejas entre factores sociales, psicológicos y biológicos", como indican desde la OMS, la sufren diariamente, pues interfiere en el trabajo o en el estudio, a la hora de comer o de dormir.

Alguna situaciones traumáticas, como el fallecimiento de un ser querido, pueden derivar en esta enfermedad, así como el abuso de sustancias como alcohol o drogas. En la alimentación también podríamos encontrar otro factor de riesgo, pues un estudio ha relacionado ciertos alimentos con la enfermedad.

Se trata del estudio publicado en el portal web ScienceDirect hace escasos meses y llevado a cabo por el CIBER (Centro de Investigación Biomédica en Red) y el Instituto de Investigación Biomédica de Girona Josep Trueta (IDIBGI). En sus conclusiones se puede leer que "el consumo de la comida ultra procesada se asocia con síntomas depresivos", además de con "volúmenes más bajos dentro de la red cerebral mesocorticolímbica implicada en procesos de recompensa y monitoreo de conflictos".

Más de 150 personas participaron en la investigación

En el estudio se sometieron a dieta 152 personas y se analizó "las relaciones entre el porcentaje de consumo de comida ultra procesada (en gramos) de la dieta total, los síntomas depresivos y los volúmenes cerebrales de materia gris".

En un comunicado explicaban Oren Contreras-Rodríguez y José Manuel Fernández-Real, los investigadores principales del estudio, que "como hipótesis de trabajo, esperábamos que un mayor consumo de ultra-procesados se asociara con un mayor riesgo de síntomas depresivos y un menor volumen de sustancia gris en la amígdala y regiones frontales, especialmente en participantes con obesidad", tal y como recoge el diario La Razón. Los investigadores añaden que "los resultados confirmaron nuestra hipótesis".

La relación que existe entre el consumo de la comida ultra procesada y la depresión es solo otro punto negativo que tienen estos alimentos, que cuentan con cantidades elevadas de grasas y con poco valor nutricional. Su ingesta también está relacionada con un mayor riesgo de padecer obesidad, diabetes tipo 2, enfermedades relacionadas con el corazón o ciertos tipos de cáncer, por lo que la mejor opción es mantener a las bebidas azucaradas, carnes procesadas, bollería industrial o cereales refinados fuera de nuestra dieta.