La aldaba
Carlos Navarro Antolín
La lección de Manu Sánchez
Marta Cárdenas de Eguino, nutricionista materno-infantil
Los cambios en la nutrición infantil de los últimos años han posicionado a la dieta no solo como un medio de crecimiento y desarrollo, sino también como un factor preventivo de la salud en la vida adulta. Optimizar la nutrición en los primeros 1000 días de vida es una estrategia de desarrollo esencial y una forma de intervenir en un proceso metabólico temprano que persista en el tiempo. Dentro de estas nuevas tendencias de alimentación infantil, hay una que está ganando fuerza y adeptos en los últimos años: el Baby Led Weaning. Se trata de una manera de introducir la alimentación complementaria en la que el bebé decide qué, cómo y cuánto come de la variedad de alimentos que le vamos ofreciendo. Esta nueva filosofía ya está reemplazando los métodos tradicionales de cocinar papillas y triturados, aunque debes saber que no son incompatibles.
Al iniciar la alimentación complementaria los padres tienen muchas dudas, sobre todo si son primerizos, aunque también en aquellos que ya tienen hijos y se inician en este método. Hay muchas preguntas al respecto y cierto temor o inseguridad acerca de cómo el niño lo tolerará o cómo guiarle en este proceso. Pese a que las recomendaciones actuales se centran en apuestas por BLW o alimentación guiada por el bebé, en ocasiones no son fáciles de implementar. Por ejemplo, los padres que tienen que delegar el cuidado de los niños en los abuelos o guarderías saben que esta pauta de alimentación no siempre es una opción.
Por ello, el método 'mixto' es una de las opciones más comunes. Aunque no se esté realizando el baby led weaning en su técnica más clásica, este método también presenta grandes ventajas frente a la alimentación más tradicional recomendada en los manuales pediátricos más conservadores. Pero si surgen dudas con respecto al más conocido, hacerlo en un método mixto, en ocasiones, puede generar incluso más inquietud o confusión. ¿Cómo hacerlo de la manera correcta?, ¿el proceso será igual para el bebé? Marta Cárdenas de Eguino, nutricionista materno-infantil y gerente de farmapeques, nos da todas las claves.
La gerente de farmapeques explica que el blw ofrece la ventaja de introducir una gran variedad de texturas, permite que el bebé explore, que asocie sabores con colores, que estimule la psicomotricidad fina y, sobre todo, que le ayuda a autorregularse y a ser autónomo. ''Todo esto sentará las bases para una alimentación saludable en la edad adulta'', asevera.
En este sentido, pese a que la fórmula mixta es diferente al Led Weaning tradicional, la nutricionista infantil enumera también numerosos beneficios en esta transición frente a la tradicional:
Tanto los sólidos como los triturados deben darse cuando el bebé esté preparado y cumple con 4 requisitos que la experta recalca como 'esenciales':
Según esta farmacéutica, estos requisitos suelen cumplirlos en torno a los 6 meses, aunque recalca que ''cada niño es único y cada uno tiene su tiempo, por lo que no hay prisa''. Eso sí, generalmente se considera inseguro hacerlo antes de los 6 meses de edad, ya que es posible que no tengan la madurez de sus riñones, intestinos, sistema inmunológico y sistema nervioso. Hasta entonces, la leche materna o de fórmula deben ser su alimentos principal, pero una vez llegado este período es hora de dejar espacio para otros alimentos.
Sin embargo, cabe destacar, según explica esta profesional que ''la alimentación sólida debe introducirse como máximo alrededor de los 9 meses, porque ya entonces los niños pequeños se defienden mejor con la alimentación sólida, pero si no la introducimos, entonces esta reacción natural desaparece'', asegura.
Por otro lado, es importante tener en cuenta que la implementación de sólidos y triturados debe empezar ''al mismo tiempo'' para que se produzca una transición y el infante pueda iniciarse en la nueva alimentación sin dificultades. Una vez iniciado este método, Cárdenas explica que ''la proporción entre triturados y sólidos dependerá de las necesidades de cada familia, de la demanda del propio bebé y de las circunstanciasen las que se encuentre en el horario de comida''. El orden de los factores no altera al producto en estos casos.
Las instrucciones para introducir y guiar al bebé, sobre todo en los primeros momentos, son clave para que empiece a familiarizarse con esta metodología. Las más importantes, según recomienda esta nutricionista, son las siguientes:
La profesional también menciona la importancia de regular algunos nutrientes como el hierro o no sobrepasar la ingesta recomendada de proteínas. Esto se debe a que con esta fórmula, cuando los bebés se encuentran en la guardería u otros espacios en los que se le ofrece triturados, ya se le suele añadir una cantidad suficiente de carne o pescado que incluye la proteína necesaria. Volver a añadirla en otra comida, resulta contraproducente y puede producir obesidad en el futuro. ''Las proteínas no deben superar el 15%de las calorías totales'', puntualiza.
Como asesora de lactancia, Cárdenas de Eguino, vuelve a recalcar la'' importancia de la leche materna como principal alimentos hasta los 12 meses aproximadamente''. Esto quiere decir que primero habrá que dar la toma correspondiente y luego ofrecer los alimentos. ''No se sustituyen tomas de leche ya sea materna o de fórmula por comida. La comida se ofrece además de la leche no en sustitución de la misma.'', sentencia.
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