El parqué
Nicolás López
Tono mixto
Consejos salud
Con la llegada del frío y las bajas temperaturas, lidiar con la tos y los resfriados se convierte una tarea porpia del día a día. Es muy común ver personas tosiendo en el ámbito familiar, el trabajo o el transporte público.La tos, pese a no ser muy grave en la mayoría de los casos, es bastante molesta. Ésta ocurre porque las terminaciones nerviosas de las vías respiratorias que se encuentran entre la garganta y los pulmones ser irritan por diferentes motivos: polvo, bacterias, virus..; Sus causas pueden venir de diferentes afecciones, aunque las más comunes son las alergias, virus, las infecciones respiratorias o el reflujo gástrico.
La tos puede clasificarse de dos maneras, en tos seca y tos productiva. La tos productiva es aquella en la que se expulsa mucosidad o flemas mediante la acción de toser. Esta tos no debe suprimirse, puesto que tiene un efecto beneficioso para el organismo. Sin embargo, sí que es posible tomar algo para producir un efecto expectorante y, de esta manera aflojar la mucosidad. El resultado es que para el organismo es más fácil deshacerse de la mucosidad.
La tos seca es diferente a la tos productiva, por lo que sí que es beneficioso intentar suprimirla. Su acción puede ser persistente y perdurar incluso una vez se ha pasado el motivo subyacente que la origina. Ambas pueden provocar dolor muscular en la caja torácica, molestias en la garganta y no te deja dormir. Es en ese momento cuando los remedios naturales pueden ayudarte a ponerle freno. Aquí te dejamos algunos de ellos.
Para adultos y niños de 1 año en adelante, la miel se puede utilizar para tratar la tos seca diurna y nocturna. La miel tiene propiedades antibacterianas y también puede ayudar a cubrir la garganta, aliviando la irritación.
Para usar la miel como tratamiento de la tos, mezcle 2 cucharadas con agua caliente y un té de hierbas. Beba esta mezcla una o dos veces al día. También puedes tomar una cucharadita de miel varias veces al día.
El jengibre es un buen aliado natural contra el dolor gracias a su contenido en gingerol, una potente sustancia antiinflamatoria que también actúa como analgésico.
Además, es un gran aliado contra los ataques de tos, ya que sus compuestos picantes actúan como relajante muscular, ayudando a controlar los espasmos que causan la tos y aliviando este molesto síntoma. Tómalo en infusión, con miel y limón.
Durante siglos, la cúrcuma se ha utilizado para tratar afecciones de las vías respiratorias superiores, bronquitis y asma en la medicina ayurvédica. La cúrcuma contiene curcumina, un compuesto que puede tener propiedades antiinflamatorias, antivirales y antibacterianas. También puede ser beneficiosa para varias afecciones, incluida la tos seca.
La curcumina se absorbe mejor en el torrente sanguíneo cuando se toma con pimienta negra. Puedes agregar 1 cucharadita de cúrcuma y 1/8 cucharadita de pimienta negra en una bebida, como jugo de naranja frío, y beberlo. También puedes convertirlo en un té caliente.
Sus acciones principales son las de antiinflamato ria, expectorante y emoliente, destacando su actividad antibacteriana y antivírica. El regaliz es capaz de aumentar las secreciones salivares que cubren la mucosa de la garganta suavizando su irritabilidad y paliando la tos seca.
Prepárala hirviendo una cucharada sopera rasa por cada vaso de agua y tómala de una a tres veces al día, con miel y limón. No conviene exceder la dosis porque puede resultar tóxica y debe evitarse en caso de hipertensión o insuficiencia renal.
El ajo también es un remedio natural que funciona muy bien para calmar la tos con flema, y contiene varias propiedades que hacen que actúe como un antibiótico natural. Para que el ajo sea efectivo es posible consumirlo de dos maneras. Una de ellas, al ingerirlo crudo, preferiblemente en ayunas. No obstante, esta no es una opción viable para todo el mundo , porque puede causar malestar estomacal.
La raíz de malvavisco es una hierba muy usada a lo largo de la historia como tratamiento para la tos y los dolores de garganta. La hierba puede mejorar la irritación que produce la tos, debido a su alto contenido en mucílago. Se trata de una sustancia espesa y pegajosa que cubre la garganta.
En otro pequeño estudio se reveló que un jarabe para la tos a base de hierbas con raíz de malvavisco, tomillo y hiedra alivió la tos provocada por los resfriados comunes y las infecciones de tracto respiratorio. Tras 12 días de tomar el jarabe, el 90 por ciento de los participantes calificaron su efectividad como buena o muy buena.
Los compuestos volátiles de la cebolla que se van liberando después de cortarla, en especial la quercitina, tienen acción antiinflamatoria y ayudan a reducir la tos.Corta una cebolla por la mitad y déjala en la mesita de noche mientras duermes o cerca tuyo si reposas en el sofá.
Las tisanas con hojas de eucalipto, deliciosas con limón y miel, son aptas para curar los catarros y el aceite esencial de esta planta está indicado, tanto por vía externa como interna, para el tratamiento sintomático de los catarros de las vías respiratorias altas.
El vapor es uno de los mejores remedios ya sea para una tos, un resfriado o para la congestión. El uso de esta vieja práctica ayuda liberar mucosidad y flemas casi inmediatamente. También es posible añadir aceites que facilitan esta tarea y estimulen el efecto positivo.
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