¿Padeces rosácea y todavía no lo sabes? Estas son las claves para tratarla

Son muchos los que lleva años luchando contra el acné, viendo cómo pasan los años y viven en una continua adolescencia, y es que a veces el problema del acné puede ser algo más que acné. Se trata de problemas como la rosácea, que tienen aspecto parecido a esos granitos de la pubertad pero que aparece a edades más avanzadas y en muchos de los casos es una continuación del acné.

¿Cómo diferenciarlo?

La rosácea suele aparecer en la zona de las mejillas y como su propio nombre indica, tiene un color rosado. Los síntomas más comunes suelen ser ardor en las mejillas, rojeces, tirantez, sensibilidad e intolerancia a muchos cosméticos y, en ocasiones, granos grandes y profundos. Es molesta e incómoda para quien la padece, pero reconocerla es fundamental para tratarla correctamente y luchas contra ella.

Hay varios tipos y cada una tendrá su forma de tratarla. “La forma vascular se manifiesta por la presencia de enrojecimiento de forma intermitente, la forma papulo-pustulosa combina la rojez con brotes de acné y la forma hipertrófica se caracteriza por una nariz gruesa deformada, pero es una variante mucho más rara y sólo afecta a los hombres.” Indica Gloria Montero, Training Manager de Medik8.

Aunque el último tipo solo afecte a hombres, la mayoría de pacientes con rosácea son mujeres, ya que afecta mucho más, debido a factores como la sensibilidad de la piel. “Los síntomas aparecen alrededor de los 30 años, aunque la edad más común de estas manifestaciones se sitúa alrededor de los 50 años y suele estar asociada a la piel sensible”, explica Montero.

La aparición de la rosácea se debe en gran parte a la genética. Pero el cuidado de la piel y factores ambientales como el sol también afectan bastante. Es por ello que es tan importante usar protección solar durante todo el año. Las variaciones de temperatura o la ingesta de estimulantes como alcohol y comida picante también hace que aparezca.

Cómo tratarlo

Lo ideal para tratar este problema es usar cosméticos específicos, ya que a las personas que tienen rosácea pueden crearles reacción algunos productos convencionales. Los productos especializados en rosácea están, sobre todo, enfocados a calmar la piel para hacer desaparecer las rojeces por un lado y, por el otro, a hidratarla en profundidad y reparar la barrera lipídica para que esta sea capaz de protegerse de nuevo de los factores ambientales que tanto la alteran.