¿Cuáles son las posibilidades de contraer cáncer de pulmón aunque no seas fumador?

Usted probablemente piensa que no está en riesgo para el cáncer de pulmón porque nunca ha fumado. Aunque el riesgo si eres fumador es exponencialmente peor, ya que puede tener un aspecto potenciador, no existe garantía para los que nunca han fumado. Entre ellos, uno de los factores de riesgo que existen más allá del tabaquismo son mutaciones por procesos naturales en el cuerpo. Pero hay más.

Pese a que el tabaquismo representa el riesgo más grande para el cáncer de pulmón y fumar es responsable por más de un 80% de los casos diagnosticados,aproximadamente entre el 10 al 25% de los cánceres de pulmón se producen en personas que no han fumado nunca. De hecho, la cifra personas que nunca han fumado con cáncer de pulmón sobrepasa la de otras personas con ciertos tipos comunes de cáncer tales como ciertas leucemias o linfomas.

En los Estados Unidos, alrededor del 10 al 20 % de los casos de cáncer de pulmón, o de 20.000 a 40.000 casos cada año, ocurren en personas que nunca han fumado o fumaron menos de 100 cigarrillos en su vida.

En este sentido, los investigadores han avanzado considerablemente durante la última década respecto del entendimiento de lo que causa cáncer de pulmón en las personas que nunca han fumado. Estos son algunos de sus descubrimientos:

FACTORES DE RIESGO

-El gas radón. El radón, se produce por la descomposición natural del uranio en el suelo, las rocas y el agua y, con el tiempo, se vuelve parte del aire que respiras. Es un gas incoloro, inodoro y radioactivo que,a veces, se concentra en los hogares que han sido construidos en terrenos con depósitos naturales de uranio. Los estudios han encontrado que el riesgo para el cáncer de pulmón es más alto para las personas que han vivido por muchos años en un hogar contaminado por el radón. El radón causa unos 20.000 casos anuales de cáncer de pulmón, lo que lo convierte en la segunda causa principal de esta enfermedad

-Fumador pasivo. Cada año, casi 8.000 personas mueren por cáncer de pulmón como resultado de respirar el humo de segunda mano. Las que leyes prohíben fumar en lugares públicos han ayudado a reducir este peligro, pese a ello sigue siendo una causa común en el diagnóstico de la enfermedad.

-Los agentes que causan cáncer en el trabajo. Para algunas personas, la exposición laboral al asbesto y otras sustancias como el arsénico, el cromo y el níquel, suponen también un riesgo para desarrollar cáncer de pulmón, sobre todo si eres fumador. La exposición a tales materiales carcinógenos en el empleo se ha reducido en años recientes, mientras el gobierno y las industrias han tomado más pasos para proteger a los trabajadores.

-Antecedentes personales o familiares del cáncer de pulmón. El riesgo de padecer cáncer de pulmón puede ser mayor si sus padres, hermanos o hijos tuvieron la enfermedad. Esto puede ser así porque también fuman, o viven o trabajan en el mismo lugar donde están expuestos al radón y a otras sustancias que pueden causar cáncer de pulmón.

-La contaminación ambiental. La contaminación ambiental tanto en interiores como en exteriores puede contribuir al cáncer de pulmón. Anualmente, en el mundo, se estima que alrededor de 500.000 muertes por cáncer de pulmón y 1,6 millones de muertes por EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), pueden atribuirse a la contaminación del aire.

-Las mutaciones genéticas. Las nuevas investigaciones están revelando más información acerca de lo que causa que las células se vuelvan cancerosas y cómo difieren las células de cáncer de pulmón entre los no-fumadores y los fumadores. Un tipo específico de mutación genética activa un gen que normalmente ayuda a las células a crecer y a dividirse.

-Alimentación. La alimentación es un factor clave en el cáncer, tanto en su prevención como en su desarrollo prematuro. Los científicos están estudiando diversos alimentos y suplementos nutricionales para determinar si aumentan el riesgo de cáncer de pulmón. Sí sabemos que los fumadores que toman suplementos de beta-caroteno tienen un mayor riesgo de padecer cáncer de pulmón.