La enfermedad que padece Carmen Sevilla desde hace décadas por la que está hospitalizada en estado grave
La aclamada actriz andaluza padecía alzhéimer desde 2009, una enfermedad que le había producido un estado neurodegenerativo muy avanzado en los últimos años
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Carmen Sevilla, cuyo nombre real es María del Carmen García Galisteo, ha sido ingresada en un hospital de Madrid ingresada en un hospital de Madriddesde el pasado domingo debido a problemas de salud. A sus 92 años, la reconocida artista sufre de Alzheimer, una enfermedad que le fue diagnosticada en 2009 pero cuya situación se hizo pública en 2012. Desde hace años, la querida artista no recibe visitas, a voluntad de su propio hijo Augusto Algueró y, desde hace unos años, su familia aseveraba que la intérprete padecía un deterioro cognitivo muy avanzado deterioro cognitivo muy avanzadoy que ya no era capaz de reconocer a nadie. Dada su avanzada edad y su cuadro clínico, el Alzheimer ha ocasionado complicaciones que han requerido de una atención constante en el geriátrico donde residió y, en las últimas semanas, las complicaciones en su estado de salud han requerido de un ingreso inmediato. Por el momento no han trascendido noticias desde que ingresara en el hospital Puerta de Hierro. ¿Cómo avanza esta enfermedad? ¿Qué novedades hay en su tratamiento? ¿Cuál es su origen? Te lo contamos.
Qué es el alzhéimer
El Alzheimer es una forma de demencia que provoca dificultades en la memoria, el pensamiento y el comportamiento. Los síntomas suelen aparecer de forma gradual y empeoran con el tiempo, llegando a ser tan graves que afectan a las actividades diarias. En España, esta enfermedad afecta a aproximadamente 800.000 personas, según datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN), y la edad es uno de los factores de riesgo más importantes.
Esta enfermedad se caracteriza por la pérdida y muerte progresiva de neuronas, lpérdida y muerte progresiva de neuronao que conduce al deterioro de las funciones cognitivas, afectando la capacidad funcional y generando discapacidad y dependencia. Aún no se conoce la causa exacta y detallada de la enfermedad, aunque cada vez se sabe más sobre el origen multifactorial de esta enfermedad. Las hipótesis, eso sí, han ido variando con el tiempo y se van poniendo en duda a medida que pasan los años y la ciencia conoce más sobre el cerebro humano.
¿Cuál es su origen?
La teoría sobre el origen y desarrollo del Alzheimer se ha centrado en una proteína llamada beta-amiloide, que se acumula en forma de placas en las neuronas de las personas afectadas por la enfermedad. Se creía que esto ocurría debido a dos procesos cerebrales patológicos bien documentados: la acumulación de péptidos beta-amiloide y la modificación de la proteína Tau. La acumulación de placas de proteína beta-amiloide y ovillos neurofibrilares en el cerebro, que dañan las células nerviosas y causan la pérdida de conexiones entre ellas. Estos cambios conducen a la degeneración progresiva de las funciones cognitivas y a una desestructuración de la arquitectura cerebral.
Esta es la teoría más extendida y en la que se han basado todas las investigaciones y tratamientos que le ha sucedido. Sin embargo, otras vías de investigación han puesto en duda esta hipótesis han puesto en duda esta hipótesisy han explorado otras. Por ejemplo, una de las que más ha llamado la atención es la de considerar el alzhéimer un trastorno autoinmune. alzhéimer un trastorno autoinmune. Así lo afirmó un equipo de investigadores del Instituto Krembil para el Cerebro, afiliado a la red de atención médica University Health Network en Canadá, quienes plantearon que el Alzheimer puede ser un trastorno autoinmune en lugar de ser simplemente un trastorno neurodegenerativo. Según esta teoría, la proteína beta-amiloide, en lugar de ser solo un marcador de la enfermedad, podría estar involucrada en una respuesta inmunitaria anormal en la cual el sistema inmunitario ataca por error a las células cerebrales. Esta nueva perspectiva abre nuevas posibilidades de tratamiento para el Alzheimer al centrarse en el componente autoinmune de la enfermedad.
"Nosotros pensamos que la beta-amiloide está dónde debe estar, no se acumula. Actúa como un péptido inmune -un mensajero en el interior del sistema inmunitario- que sirve para reparar el daño neuronal que podemos sufrir a causa de un traumatismo craneoencefálico. Y si un virus o una bacteria se presenta, la beta-amiloide está ahí para enfrentarse a ella", argumentó el Dr. Donald Weaver, autor del estudio y co-director del Instituto Krembil para el Cerebro.
Por otro lado, otros factores también se han relacionado con el desarrollo del Alzheimer. Estos incluyen la predisposición genética, factores ambientales, inflamación crónica, desequilibrios en la producción y eliminación de proteínas cerebrales, así como trastornos vasculares y cardiovasculares.
Avances en el tratamiento
En el ámbito de los tratamientos farmacológicos para el Alzheimer, se han desarrollado varios medicamentos que han mostrado eficacia en el manejo de la enfermedad. Entre ellos se encuentran Lecanemab y Aducanumab, considerados hasta ahora los más efectivos. Recientemente, se ha añadido un nuevo fármaco a esta lista: Simufilam,Simufilam un medicamento experimental desarrollado por la compañía farmacéutica estadounidense Alzheon.
En ensayos clínicos de fase 2, este último fármaco, simufilam, ha demostrado eficacia en alrededor del 50% de los casos en los que se ha probado. Este fármaco ha mostrado mejoras en los síntomas del Alzheimer, lo que representa un avance significativo en el tratamiento de esta enfermedad. Cabe destacar que, al ser un medicamento en desarrollo, aún se requieren más estudios clínicos para confirmar su eficacia y seguridad antes de que pueda estar ampliamente disponible como tratamiento para el Alzheimer.
Otros tratamientos son:
- Terapias de inmunoterapia: Se están desarrollando y evaluando terapias que apuntan al sistema inmunológico para combatir el Alzheimer. Estas terapias buscan estimular una respuesta inmunitaria para eliminar las placas de beta-amiloide y otros agregados tóxicos del cerebro.
- Terapia génica: La terapia génica es una estrategia prometedora en la investigación del Alzheimer. Se están realizando estudios para desarrollar terapias que puedan modificar los genes involucrados en el desarrollo de la enfermedad, con el objetivo de reducir la acumulación de beta-amiloide y proteínas Tau en el cerebro.
- Tratamientos combinados: Se están estudiando enfoques terapéuticos combinados, que incluyen diferentes fármacos y terapias, para abordar múltiples aspectos del Alzheimer. La combinación de medicamentos, terapias cognitivas y cambios en el estilo de vida puede tener un impacto más significativo en el manejo de la enfermedad.
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